Los camiones de más de 10 metros tendrán limitado el paso por el centro sarriano

Limitación de tonelaje en la calle Marquesa Casa López. vila
photo_camera Limitación de tonelaje en la calle Marquesa Casa López. vila

El paso de camiones por el casco urbano de Sarria quedará restringido a partir del próximo mes de marzo. La medida, acordada por el Concello en base a un estudio conjunto con la Policía Local, afectará únicamente a los vehículos de más de diez metros de largo, que no podrán circular por la calle Diego Pazos y por el tramo de Calvo Sotelo comprendido entre la Avenida de Becerreá y el cruce de Catro Camiños.

La prohibición del tránsito de vehículos de gran tamaño por el centro de la villa era una de las opciones que existía desde la apertura del corredor y de la circunvalación del polígono de O Morelle.

En un primer momento se valoró la posibilidad de establecer la limitación en estas dos calles en función del tonelaje, pero finalmente se optó por la longitud. De este modo se pretende evitar los atascos que se formaban con frecuencia y ganar fluidez en el tráfico, explicó el edil de infraestructuras de Sarria, Manuel López.

Según dijo, a lo largo de este mes se colocarán las señales de prohibición de cara a la entrada en vigor de la medida en marzo. El incumplimiento de la norma conllevará sanciones económicas.

En las entradas de Sarria también se instalarán indicadores informando a los conductores de las alternativas existentes para evitar el paso por el centro urbano.

Hasta la fecha, únicamente existían limitaciones para camiones en base al tonelaje. Es el caso de la calle Marquesa Casa López, por la que no pueden circular los vehículos de más de 3,5 toneladas, con la excepción de los servicios municipales como los dedicados a la recogida de basura.

También se restringió el acceso a la explanada de O Chanto después de que un camión de grandes dimensiones quedase atrapado al hundirse el firme cuando intentaba voltear en este lugar.

Otra de las señales de tonelaje se instaló hace unos meses en la entrada a la localidad por el barrio del Lázaro, con el fin de evitar el tránsito de los vehículos más pesados por la Rúa do Porvir y Marqués de Ugena, donde el estrechamiento del vial causaba problemas.

El nuevo plan de tráfico supuso también la creación de nuevas rotondas en la zona de A Pontevella, el tramo final de Calvo Sotelo en dirección Samos y el cruce de A Avenida, así como la transformación de la glorieta de Catro Camiños. En estos lugares, se mejoró la señalización horizontal en los últimos días para evitar confusiones entre los conductores.

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