Los atascos de tráfico persistirán en la Travesía da Mariña de Viveiro durante una semana, según las estimaciones de la Policía Local, cuyo inspector principal, Juan Manuel Escudero, explicó ayer que las retenciones más importantes se producen a las horas punta, es decir, a primera hora de la mañana, así como a la salida de los colegios.
Las colas, que ayer se repitieron e incluso alcanzaron la variante de Verxeles, están motivadas por las obras que acomete la compañía de telecomunicaciones R, que cablea con fibra óptica el municipio para ofrecer servicio de internet, televisión y telefonía. Los trabajos dentro del término municipal se prolongarán hasta finales del próximo mes de octubre, fecha a partir de la cual, la firma empezará a prestar sus servicios a los potenciales usuarios, que estima en unas 8.000 personas.
Las interrupciones en la circulación son constantes, dado que la travesía es un lugar de paso obligado y a pesar de que la empresa puso operarios que regulan el tráfico, tal como le requirió el Concello. La entidad local no autorizó los trabajos para las jornadas de los jueves, dado que la ciudad acoge esos días el mercado semanal en la Praza Maior, lo que supone una mayor afluencia de vecinos, sobre todo de las parroquias.
El desarrollo del mercado ya representa de manera habitual una congestión añadida para el tráfico rodado, además de más escasez de plazas de aparcamiento en todo el contorno del casco histórico de la ciudad del Landro, puesto que muchos vivarienses aprovechan para agrupar sus compras ese día.
OBRAS PENDIENTES.
Por otro lado, el concejal de obras de Viveiro, Jesús Fernández Cal, lamentó ayer que tuviesen que pasar once meses para que «los bacheos de urgencia» derivados de los daños causados por las lluvias de junio de 2010 se licitasen. De hecho, solicitó más paciencia a a los vecinos afectados en Cuiña, Barbeito, Randamil, Pallaregas, Pénjamo, San Lázaro, As Nogueiras, y les anuncia que «tengan la completa seguridad de que se ejecutarán en breve plazo, al margen de los resultados electorales», subraya.
El edil explica que la empresa adjudicataria todavía tiene un mes para efectuar el replanteo de la obra, «lo que sitúa el inicio de los trabajos después de las elecciones. Parece clara la intencionalidad de los responsables de la Xunta», reprocha.
Fernández Cal explica asimismo que estaba previsto dar un doble riego asfáltico en la zona que discurre entre la estación de servicio Buenavista y el cementerio de Altamira, en Viveiro, actuación que afecta a los barrios de Pénjamo y San Lázaro, pero como el Concello gestionó el asfaltado, hace unos meses, de una parte importante de ese tramo, se le solicitó por escrito al subdirector de Infraestructuras de la Consellería de Medio Rural que la cantidad total de la inversión prevista para reparar dicho vial, que también conduce a la zona de As Nogueiras, se destine por completo a acondicionar el tramo que conecta con dicho paraje natural.
