Los análisis demuestran que el agua de las traídas de Láncara es potable

Las pruebas eliminan la alarma creada por supuesta contaminación de un afluente del Neira
Un operario retira, la pasada semana, la carga del camión que acabó en el cauce
photo_camera Un operario retira, la pasada semana, la carga del camión que acabó en el cauce

El Ayuntamiento lancarés normalizó este viernes el suministro de agua al levantar la recomendación de no utilizar las traídas de A Pobra de San Xiao y San Pedro de Láncara para beber ni cocinar, tras conocerse nuevos análisis que confirman que el agua no presenta contaminantes y es potable. Con los resultados de estas nuevas pruebas se elimina la alarma generada por una supuesta contaminación de un afluente del río Neira, en el que está la captación de las redes.

Los hechos se remontan a la pasada semana, cuando se produjo un accidente en la A-6, a su paso por el municipio de Baralla, en el que se vieron implicados dos camiones. Parte de la carga de uno de los vehículos cayó al cauce, aunque el mismo día del siniestro los servicios de emergencia ya descartaron la contaminación.

La empresa encargada del control de las traídas en el municipio de Láncara practicó unos análisis definitivos, que se conocieron ayer y que confirmaron que el agua es apta. Por ello, el Concello decidió levantar la restricción, según explicó el alcalde, Darío Piñeiro.

La Consellería de Sanidade también realizó pruebas "e deron ben", aunque "está á espera de coñecer outras análises máis completas", aseguró el regidor. Este señaló que esta misma semana visitó la zona en la que cayó parte de la carga del camión -como ordenadores, cuerdas, productos de ferretería y algún insecticida- y se encuentra "limpa".

RETIRADA DE RESTOS. La retirada de los restos de la carga del vehículo fue llevada a cabo por la Secretaría Xeral de Calidade Ambiental, que ahora trabaja para cerciorarse de que los residuos no hayan afectado al suelo, informó este viernes la Xunta de Galicia. La Administración autonómica confirmó, además, que se encuentran a la espera de conocer los análisis definitivos, si bien, señaló, que las primeras pruebas descartan la contaminación del cauce.

Tras el accidente de los camiones, el Ayuntamiento cortó la pasada semana la traída de Láncara «por precaución» a la espera de practicar análisis para conocer si realmente había afectado el vertido. En cuanto al abastecimiento de A Pobra, mantuvo el servicio, al estar la captación a más distancia del punto de accidente, pero, a través de un bando, se aconsejó a los vecinos no utilizar el agua para beber ni cocinar.

En las muestras tomadas sobre el terreno en las dos captaciones ya no se detectaron contaminantes. El corte se levantó al día siguiente al ser correctos los primeros análisis y confirmar que el agua es apta para el consumo. Sin embargo, por prudencia, a la espera de nuevas pruebas, se mantuvo la recomendación de no usar agua para consumo humano de las dos traídas, las de A Pobra y San Pedro de Láncara. Este último abastecimiento da servicio a todas las parroquias del val de Láncara, como son Armea, San Pedro de Láncara, Carracedo y Oleiros.

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