NO SOLO el verano invita a disfrutar de la playa. Entre los arenales más extraños y bellos del mundo se encuentra el de As Catedrais, en Ribadeo, que comparte lista con espacios naturales como playas de colores, una para descargar adrenalina gracias a un aeropuerto cercano u otra cuyas aguas se iluminan por la noche como una suerte de azul firmamento.
Uno de estos parajes más curiosos es la Glass Beach (playa del vidrio), en California. En el pasado siglo, los habitantes de Fort Bragg tiraban la basura al arenal: restos como vidrio, electrodomésticos y hasta coches. La Junta estatal de California, en el control de los recursos hídricos, y los mandatarios de la ciudad cerraron el área en 1967 y se llevaron a cabo varios programa de limpieza durante años para corregir el daño. Sin embargo, se dejó el vidrio, que fue erosionando el mar, formando una peculiar arena de cristal.
Las islas Marietas, en México, guardan como un tesoro una exquisita playa, playa Escondida, uno de los destinos más sorprendentes de la bahía de Banderas. Para llegar a ella es necesario nadar por un túnel.
En otras islas, las Maldivas, los millares de puntos brillantes del agua hacen que sea difícil distinguir el mar del firmamento estrellado. El causante de este espectáculo es un fitoplancton microscópico bioluminiscente que se ilumina cuando las olas chocan contra la arena.
En Galicia, concretamente en la costa lucense, se ubica la playa de As Catedrais. Recibe este nombre por el conjunto de acantilados, algunos con más de 32 metros de altura, que esculpidos por el viento y el mar, forman unos arcos y bóvedas espectaculares.
Situado en el lado holandés de la isla caribeña de Saint Martin está la famosa playa Maho. Si bien cuenta con arena blanca y agua turquesa característico de un paraíso en el Caribe, eso no es lo que hace a la playa Maho un destino turístico muy popular. Más bien, tiene mucho que ver con el aeropuerto internacional Princess Juliana justo al lado de Maho. Los aviones que arriban deben aterrizar lo más cercano posible al inicio de la pista 10, debido a la corta longitud de la pista de unos 2.180 metros, dando lugar a que los aviones en su aproximación final vuelen sobre la playa en la altura mínima.
DE COLORES
En la costa este de la pequeña isla de Harbor, en las islas Bahamas, se extiende una playa sumamente bella, Pink Beach, caracterizada por su color particular, el rosa. El agua cristalina también colabora para formar una maravillosa combinación con la arena.
Islandia es un país que nunca defrauda por su paisaje natural. Playas como la de Vik o la de Jokulsarlon destacan con el contraste de sus playas de arena volcánica con el blanco del hielo.
El archipiélago volcánico de las islas Hawai, en mitad del océano Pacífico, no solo es un paraíso para surfistas de todo el mundo sino que también esconde algunas de las playas más asombrosas del planeta. Una de ellas es la de Papakolea, cuya peculiaridad reside en el color verde de su arena.
Más cerca, en Portugal, la playa Benagil es una de las más bonitas y peculiares del mundo. Se sitúa en un pequeño pueblo del mismo nombre, en las proximidades de la popular localidad del Algarve. Las formaciones rocosas que rodean este lugar, y sobre todo su playa en el interior de una cueva, hacen de Benagil un destino único.
