Las obras de mejora de la carretera LU-901, en el municipio de Carballedo, han provocado un enfrentamiento entre el alcalde, el popular Julio Yebra Pimentel, y la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, que ayer se desplazó a la localidad para ver el avance de las actuaciones. Los trabajos arrancaron hace tres meses y el regidor le dejó claro a la conselleira que no le gusta el camino que está tomando el proyecto.
«Hai tramos que están quedando moi ben, como é o caso dos que pasan por A Barrela e A Tolda», dijo el regidor, «pero non ocorre o mesmo no resto da estrada onde se ensanchou a vía e esas ampliacións quedan a un nivel diferente da estrada o que creo que é un resultado deficiente e perigoso».
A Ethel Vázquez la pilló por sorpresa la crítica hecha en público por el alcalde y acabó contestando que el proyecto estaba hecho por técnicos competentes y que contaba con la asesoría de empresas especializadas en seguridad. Concluyó que la carretera «é máis segura e cómoda ca que había» hasta el momento.
Julio Yebra insistió en que le preocupaban sus vecinos y recordó que la vía registra un nivel de tráfico muy elevado y que en ella se producen numerosos accidentes, que ya arrojaron tres víctimas mortales. Vázquez le contestó que «ao alcalde preocúpanlle os veciños do seu concello e á conselleira os de toda Galicia».
Ese cruce de acusaciones fue el que se produjo ante los medios, pero, después, los dos políticos siguieron discutiendo en privado y finalmente la conselleira se desplazó a los puntos de la vía que generan las quejas del regidor.
Según comentó Yebra horas después, la intención de la Xunta es esperar a que repise el firme ampliado y en una segunda fase igualar toda la vía con una capa de rodadura, algo se solucionaría las deficiencias que él denuncia, pero que precisa 500.000 euros de inversión. «Eu o que reclamo é que a estrada quede nas mesmas condicións ca na zona de Ourense. A Xunta escúdase en que está en marcha a autovía que vai paralela a esa vía, pero as obras da autovía estiveron paralizadas e agora van moi lentas, así que eu defendo os veciños», concluyó Yebra.
