El río Sarria sufre nuevos vertidos procedentes de la estación depuradora de aguas residuales (Edar) de A Veiguiña por deficiencias de la misma. La problemática se debe a que las instalaciones no cuentan con capacidad suficiente para dar servicio a la localidad ante el crecimiento de la población, a lo que se suman filtraciones procedentes de las canalizaciones.
Los vertidos se producen junto a la conocida como isla de A Veiguiña, donde el cauce se encuentra lleno de lodo y de él emana un intenso hedor. Es una zona por la que pasean muchos sarrianos y los vertidos conllevan el consiguiente perjuicio para el medio ambiente y las arcas municipales, pues suponen sanciones económicas. El edil de medio ambiente, José Manuel López, dijo desconocer si en los últimos tiempos se impusieron nuevas multas al Ayuntamiento por la problemática.
Según señaló el concejal, este no es un problema nuevo, sino que se arrastra desde hace «moitos anos». La solución no pasaría solo por el arreglo de las instalaciones, sino que sería preciso la construcción de una nueva estación depuradora dado que la actual se quedó pequeña para proporcionar un adecuado tratamiento de las aguas residuales. Asimismo, habría que renovar las canalizaciones, las cuales son de cemento.
VARIOS MILLONES. Estas obras supondrían un coste de «varios millóns de euros», no asumibles para el Ayuntamiento, manifestó. El edil aseguró que desde el Concello se pusieron en contacto con Augas de Galicia para que financiara las obras, sin éxito.
La ampliación de la estación ya se barajó hace unos años. Unos técnicos de este organismo dependiente de la Xunta de Galicia llegaron a visitar las instalaciones para estudiar su estado y su mejora. En aquel momento desde el Ayuntamiento se señaló que habría que conseguir los terrenos necesarios para la obra y, posteriormente, firmar un convenio con la Administración autonómica para financiar los trabajos. Sin embargo, la ampliación no llegó a salir adelante.
Recientemente se repararon unas deficiencias en la Edar, actuación que fue ejecutada por la anterior empresa concesionaria del servicio del agua, Aqualia, para dar cumplimiento a una sentencia del juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Lugo.
