En la parroquia guitiricense de Labrada, en abril, se habla de berzas. De las berzas necesarias para preparar el menú de degustación de la cita de exaltación de este producto y también de aquellas que presiden las cestas del tradicional concurso que cada año se organiza conjuntamente con la Feira da Verza e do Lacón Cocido.
En la que ya fue la novena edición de la cita y del certamen, los hermanos Morado Miragaya se repartieron los primeros puestos de podio. Alba ganó los 90 euros del primer premio individual con un montaje por pisos en el que las berzas estaban acompañadas de vino, aceite, cacheira o pan, entre otros complementos, mientras que la cuna de berzas de Ramiro lo hizo merecedor de los 60 euros del segundo premio.
En tercer lugar se clasificó una de las propuestas que más llamó la atención del público, elaborada por Yeray Porto Roca, ya que contaba con una pota de caldo, listo para servir.
Por barrios, el diseño de Paderna se impuso al de Carballiños y As Penas, por lo que para sus vecinos fueron los 180 euros consignados como recompensa.
En esta ocasión, el jurado encargado de votar por las mejores propuestas estuvo formado por la alcaldesa de Guitiriz, Regina Polín; la teniente de alcalde, Laura Ageitos, y el párroco de Labrada, Luis Ángel Rodríguez Patiño, responsable también de oficiar la tradicional misa campestre.
La incógnita sobre los autores de cada cesta mantuvo en vilo a los asistentes, que fotografiaron en repetidas ocasiones los originales diseños antes de disfrutar de la sesión vermú a cargo de la orquesta Los Españoles, que repitió en la verbena, y de la comida de confraternidad posterior, para la que estaban apuntadas cerca de 200 personas.
Alba Morado se hizo con los 90 euros de premio a la mejor cesta individual y Paderna ganó 180 en el concurso por barrios
Los presentes pudieron degustar un menú a base de callos, cocido con berzas y postre, elaborado por el cátering Maragata, que además se encargó de preparar la cena de la feria, una tradicional churrascada nocturna en la que también se citaron decenas de personas. Antes, hubo tiempo para disfrutar de exposiciones y puestos de venta y de otro clásico de esta cita, los juegos populares vespertinos, en los que las risas siempre están aseguradas.
La Plataforma Pro Labrada se encargó un año más de organizar esta Feira da Verza e do Lacón Cocido en un recinto próximo a la iglesia parroquial, para lo que contó con la colaboración del Concello de Guitiriz, Gadis y varias casas comerciales.