La Xunta todavía permite plantar patatas pese al avance de la plaga

"Non é firme a prohibición do Ministerio de prantalas e estamos a piques de pechar o listado dos concellos afectados", advierten

Tras la reunión de alcaldes del Occidente de Asturias que tuvo lugar el martes en Vegadeo para abordar, principalmente, el problema de la plaga que afecta a las patatas, la Xunta de Galicia ha informado sobre las medidas que tomará al respecto. «Polo de agora non se pechou o listado definitivo dos concellos afectados pola polilla guatemalteca, pero estase ultimando e farase de xeito inmediato», matizan. Aclaran que pese a las informaciones que aseguran que se va a prohibir la siembra, «tampouco é firme a prohibición por parte do Ministerio de plantar patacas nas zonas infestadas, sendo de momento unha posibilidade das que se barallan para frear a expansión da praga», advierte.

La Consellería do Medio Rural precisa que las áreas en las que se han detectado tubérculos afectados por la polilla se circunscriben a A Mariña y Ferrol. «Só podemos falar de comarcas, en xeral, porque aínda se están a identificar os concellos nos que se presentou a incidencia», matizan. Para la Administración, éstas son zonas «de autoconsumo, polo tanto, non viven da venda de patacas».

Como es un problema que no afecta solo a Galicia, es el Gobierno central el que gestionará la problemática, como ya demostró en una reciente reunión sectorial de coordinación con las comunidades autónomas. El Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente ya elaboró un borrador de decreto para que cada gobierno autonómico lo consulte -en él se recoge la prohibición de sembrar patata durante dos años en los lugares afectados y las posibles indemnizaciones que percibirían los productores-. En el caso de la Xunta, el objetivo «será precisamente evitar que a praga chegue ás áreas que comercializan patacas, tanto de o ámbito da sanidade vexetal, como científico».

Admite que en 2015 ya detectaron la presencia de la polilla guatemalteca -en gallego denominada ‘couza’- y que desde entonces, para frenar su expansión, actuaron «acoutando zonas; utilizando métodos fitosanitarios; colocando preto de 900 trampas e recollendo case 12.500 individuos, así como tamén destruíndo varios lotes de patacas e pagándolles aos agricultores afectados a razón de 30 céntimos por quilo perdido».

Añaden que: «Destruíronse uns 6.500 quilos de pataca a razón de 30 céntimos por quilo, pero os agricultores indemnizados foron todos produtores de autoconsumo que o solicitaron. Non houbo ningún produtor adicado á comercilización deste tubérculo afectado».

Paralelamente, la campaña informativa se acrecienta: «A directora xeral de Gandaría, Agriculura e Industrias Agroalimentarias, Belén do Campo, xa se puxo en contacto cos responsables da Indicación Xeográfica Protexida (IXP) Pataca de Galicia, para coordinar o traballo nesta materia e ten previsto reunirse con eles o vindeiro mércores», avanzan.

El próximo lunes ya hay programados varios encuentros con responsables municipales de los lugares afectados. Asturias cree que Galicia ha de ir a la par a la hora de prohibir la siembra porque no podrían frenar la plaga en una orilla, mientras continúa en la otra. En mayo, unos comisarios europeos inspeccionarán las áreas afectadas, lo que podría conllevar medidas más restrictivas.

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