La Xunta reforzará la seguridad del peregrino en los cruces con carreteras

La protección vial se incrementará en intersecciones del Camino Primitivo en Manzoi, Carballido, y A Louzaneta
Peregrinos en la parroquia de Carballido
photo_camera Peregrinos en la parroquia de Carballido

La Consellería de Infraestruturas e Vivenda anunció este jueves la puesta en marcha de un plan de refuerzo de seguridad vial en varios cruces entre carreteras de titularidad autonómica y el Camino Primitivo. Entre las intersecciones del municipio de Lugo en las que se prevé actuar se encuentran las de Carballido y Manzoi con la carretera LU-530, vía que une Lugo y A Fonsagrada. La administración autonómica también intervendrá en la zona de A Louzaneta, en su confluencia con la LU-232, que enlaza Lugo y Friol.

Tal como explicó la Xunta, se llevarán a cabo distintas medidas de refuerzo de señalización y acondicionamiento, con la implantación de nuevas señales para advertir del peligro de cruce de peatones y peregrinos. En otros casos, se adaptará la velocidad máxima permitida, mientras que en los puntos "de peor visibilidade" la Xunta prevé la instalación de bandas transversales de alerta sobre el propio firme de las carreteras.

No en vano, según detalló la Xunta, el objetivo de todo ello es "reducir os riscos de accidente ou atropelos e mellorar a convivencia entre os peregrinos e os vehículos".

Los trabajos se llevarán a cabo en las próximas semanas y se ejecutarán con cargo al contrato de conservación ordinaria de estas vías, con una actuación que completa a otra similar recogida en un convenio entre Turismo de Galicia y el Ministerio de Fomento.

16 PUNTOS. El refuerzo de la seguridad en estos puntos del término municipal de Lugo se sumará a otros en la provincia hasta alcanzar un total de 16 cruces. Así, además de en la LU-530 y la LU-232, también se actuará en la LU-701 de acuerdo con el estudio vial elaborado en los 120 kilómetros con los que cuenta el itinerario del Camino Primitivo en la provincia.

La mejora en la protección de los peregrinos era una vieja reivindicación de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago en la provincia, cuyo presidente, Ángel Trabada, se reunió con el delegado territorial de la Xunta, José Manuel Balseiro, para conocer los pormenores de este plan.

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