Unas 260 personas reciben en la actualidad diversos tratamientos en la Unidad Asistencial de Drogodependencias (UAD) de Monforte. Es la cifra que facilitó el centro al realizar un repaso de su historia tras alcanzar el millar de personas tratadas desde la creación del servicio, en 1987 dentro del cuadro orgánico del Ayuntamiento, pues desde hace unos años está asistido funcionalmente por parte de la Consellería de Sanidade.
Pasadas varias épocas iniciales en las que el consumo de heroína, cocaína y cannabis era alarmante, desde hace unos años se califican como preocupantes los desmedidos consumos, durante los fines de semana, de alcohol, cocaína y drogas de diseño entre jóvenes.
La unidad presta atención a dos áreas sanitarias. Además de la de Monforte, los especialistas que mantienen el servicio también cubren la comarca de Valdeorras, área ourensana a la que se desplaza parte del personal una vez por semana.
La atención sobre las diferentes drogodependencias es variable desde la creación del servicio tanto por altas como bajas en las prestaciones. Por ello, desde la unidad se constata que si bien el número de historiales activos está en 260, la cifra varía en ocasiones tanto hacia arriba como para abajo. No obstante, se constata que hay, como media, más de un centenar de nuevos pacientes al año.
Desde la fundación del centro, tanto varió el número de drogodependientes que entraron y salieron como los perfiles del usuario tipo. Así, después de comenzar en primera instancia con la ayuda hacia los problemas de dependencia, también se optó desde hace unos años por incrementar las prestaciones y trabajar en la reinserción de los afectados en la sociedad y en prevenir el consumo de sustancias adictivas o perjudiciales para la salud.
Al mismo tiempo se presta todo tipo de ayuda a familiares o personas que ven afectada su vida por influencia de personas enfermas con cualquier adicción. Para ello también se trabaja en colaboración con otros centros sanitarios y servicios sociales y jurídicos.
En todos los frentes
En el departamento, ubicado en la Rúa Otero Pedrayo, donde antaño funcionó el centro de higiene, tanto se tratan las dependencias de sustancias ilegales, sobre todo de heroína, cocaína, cannabis y drogas de diseño, como adicciones al tabaco, alcohol o al juego.
La plantilla está formada por una médico especialista en psiquiatría, que ejerce como directora, una psicóloga, una trabajadora social, una enfermera en salud mental, una educadora social y una monitora de tiempo de ocio, así como un administrativo.
