La reunión con los herederos de Álvaro Gil se atrasa una semana

El delegado de Cultura de la Diputación de Lugo, Mario Outeiro, ha confirmado hoy que, finalmente, no se producirá la reunión que tenía pensado mantener esta misma semana con los herederos de Álvaro Gil para "zanjar" las negociaciones por la colección de piezas depositadas en el Museo Provincial, que engloba algunas de las más emblemáticas de la institución.

Outeiro aclaró que su intención era mantener un encuentro esta misma semana con los herederos para tratar de cerrar un acuerdo, pero finalmente esa reunión tendrá que esperar, previsiblemente, hasta la próxima, para que la familia de Álvaro Gil pueda desplazarse a Lugo.

Precisó que el gobierno de la Diputación de Lugo puso "encima de la mesa" varias "posibilidades" para que las piezas se queden en el Museo Provincial, pero evitó hablar de los pormenores de una negociación que la institución prefiere llevar con "toda cautela".

Entre 1955 y 1980, Álvaro Gil y su viuda, Antonia Arias, formalizaron la cesión al Museo Provincial de Lugo, en calidad de depósito, de una amplia obra pictórica, con destacadas creaciones de pintores catalanes y gallegos, así como de una colección de orfebrería con una treintena de piezas de incalculable valor y notable interés histórico y artístico.

Tras años de litigios, el Tribunal Supremo ratificó una sentencia del Juzgado de Lugo, que ya había sido refrendada por la Audiencia Provincial, que obliga a la Diputación, entidad gestora del Museo Provincial, a devolver a los herederos de Álvaro Gil las obras que este benefactor había dejado en depósito.