La Xunta de Galicia, a través de su Instituto Galego da Vivenda e Solo, desveló el sábado que le ha dado el visto bueno definitivo a un proyecto catalogado como singular que permitirá que una empresa, la primera, se instale en el puerto seco de Monforte.
Se trata de la firma Abiga (Aproveitamento da Biomasa Galega), que invertirá en esta iniciativa 20 millones de euros. Uno de sus responsables, José Manuel González Illán, declaró que la idea es comenzar a crear las instalaciones y montar la maquinaria necesaria a principios del próximo año, estimando que tales trabajos se prolongarán durante un espacio temporal de entre doce y quince meses.
En cuanto a la importante inversión a realizar, González Illán señaló que será necesario instalar hasta 18 máquinas de carbonización hidrotermal que convierten la biomasa en turba y que cada uno de estos aparatos, de tecnología española desarrollados en Valencia, tiene un coste cercano al millón de euros.
Por lo que respecta a lo que supondrá la puesta en funcionamiento de esta factoría en el puerto seco monfortino, este responsable de Abiga habló de la creación de 25 puestos de trabajo directos y de varias decenas de indirectos, pues además del uso del ferrocarril para acercar hasta Monforte la biomasa necesaria para su transformación en turba, la empresa prevé utilizar transporte por carretera.
"Podemos hablar de unos 5.000 camiones de salida y entrada en la ciudad cada año, además del tren, lo que puede dar idea de la magnitud de nuestro proyecto", destacó González Illán. Y es que las previsiones que maneja Abiga son tratar anualmente 100.000 toneladas de biomasa.
FORMALIZACIÓN. La Xunta de Galicia se congratuló de que el desarrollo del puerto seco monfortino "dea un paso máis coa presentación do proxecto básico do plan singular".
Con el visto bueno del IGVS se procederá de inmediato a la formalización de escritura de los terrenos necesarios en la plataforma logística de mercancías, disponiendo Abiga de un periodo de tres años para desarrollar su plan, si bien desde la empresa, insistieron, pretenden que todo esté listo para entrar en funcionamiento en el plazo máximo de 15 meses desde el inicio de las obras.
Paralelamente, el Instituto Galego de Vivenda e Solo solicitó al Ayuntamiento monfortino la licencia de segregación de una parcela, ya que el proyecto ocupará tres incluidas en la primera fase de urbanización y una cuarta que figura dentro de la segunda parte de desarrollo de este suelo industrial
En total, Abiga dispondrá de 40.000 metros cuadrados de superficie para llevar adelante su iniciativa, calificada de singular por la Xunta debido a que se justifica su carácter estratégico, pero también su localización especial dentro de la política económica e industrial que apoya la Xunta.
