La Policía Local de Sarria ha abierto diligencias por el ataque con huevos contra el edificio de la piscina cubierta y ha iniciado una investigación para dar con los autores de este acto de vandalismo, perpetrado en la noche del sábado al domingo en las instalaciones deportivas de O Chanto.
Los agentes sospechan que las docenas de huevos arrojadas contra la piscina municipal fueron sustraídas previamente, pero su origen se desconoce por el momento. Se trata de alimentos que solo llevan rotulada la fecha de envasado y ninguna información más sobre la empresa o cualquier otro dato de su procedencia. Los autores utilizaron dos cajas de huevos, una de las cuales quedó entera en el lugar mientras que la otra acabó en su mayor parte lanzada contra el inmueble.
De la investigación se encarga la Policía Local, que esa noche sí tenía turno al tratarse de fin de semana, por lo que estaba excluida de la eliminación de patrullas nocturnas que entró en vigor este año de domingo a jueves.
"Parece que foi algo excepcional e, no caso de que se repetisen feitos deste tipo, tomaríanse medidas", señaló Efrén Castro
CONDENA. El concejal de deportes, Efrén Castro, condenó este acto de vandalismo, que atribuyó a un hecho aislado. "Parece que foi algo excepcional e, no caso de que se repetisen feitos deste tipo, tomaríanse medidas", señaló el edil, quien explicó que el incidente no ocasionó daños materiales.
Sí obligará, no obstante, a realizar unas labores de limpieza más intensas y con aplicación de algún tipo de producto especial para eliminar las manchas de la pared por la que se accede al edificio.
La piscina cubierta se encuentra en una zona muy frecuentada durante el día por su proximidad a los centros de enseñanza, pero por la noche no registra tanto movimiento, lo que facilita a los autores de este tipo de conductas incívicas actuar sin ser vistos.
El edificio de la piscina, donde hace meses se produjeron pintadas en otro acto de gamberrismo, está pendiente de entrar en servicio para practicar la natación. Las instalaciones, rematadas desde 2013, se usan para impartir diversos cursos del Concello y, una vez colocadas las calderas para poder calentar el agua, se encuentra en trámite el sistema de gestión para su puesta en marcha definitiva.
