La oposición critica la rebaja salarial en PSA mientras el PP la considera ''responsable''

Los grupos de la oposición en el Parlamento de Galicia han criticado este miércoles la rebaja salarial en la planta de PSA en Vigo como una de las condiciones para lograr la adjudicación del modelo de furgoneta K9, mientras que el PP ha considerado que se trata de un acuerdo "responsable".

La diputada de AGE Eva Solla ha defendido una iniciativa, apoyada por el resto de la oposición y que ha sido rechazada con los votos del PP, en la que instaba a la Xunta a intervenir defendiendo que no se degraden más las condiciones laborales de la plantilla de PSA y para que la dirección de la empresa retome las negociaciones del plan de ajuste.

Además, Solla proponía que la Xunta realizase un estudio para evaluar el impacto en materia de empleo y el impacto económico de las dinámicas de deslocalización y de competencia desleal (dumpin social) que tienen para el sector de automóvil y en particular en el área de Vigo.

AGE también pretendía que el Parlamento instase al Gobierno gallego a exigir el riguroso cumplimiento de los compromisos en materia de inversiones de empleo realizados por Citroën y vinculados a las cuantiosas ayudas públicas recibidas por la empresa.

Eva Solla ha asegurado que estas iniciativas deberían ser las que pusiera en marcha y apoyase la Xunta en vez de andar felicitándose "como si hubiera tocado el gordo de la lotería" con la adjudicación de las furgonetas.

También ha criticado que el presidente gallego estuviese "muy presto para escapar del debate de presupuestos" para "apuntarse el tanto" de la foto en París, "mientras los trabajadores tienen que soportar la carga de recortes salariales".

"¿De qué van a comer las familias hasta 2018?", se ha preguntado Solla, fecha en la que comenzará la fabricación de este modelo, ya que "resulta de obscenidad y desvergüenza que Feijóo se apunte el tanto de la K9 que, si se va a construir, será a costa de recortes salariales y de la clase trabajadora".

El diputado del PP Pedro Arias se ha felicitado de un acuerdo "responsable y socialmente adecuado para circunstancias en las que están todos los actores" y ha asegurado que es preciso trabajar conjuntamente tanto la empresa como los trabajadores.

Ha indicado que no existe consenso entre los trabajadores sobre las medidas que se han tomado y ha cuestionado que sean dumpin.

"¿No podemos esperar que con una recuperación sostenida se puedan aumentar los salarios y la productividad?", ha preguntado.

Abel Losada (PSdeG) ha insistido en que su partido se alegra y apoya la adjudicación a la planta de Vigo, pero ha destacado que se debe "al esfuerzo de los trabajadores en un momento muy difícil".

La diputada del BNG Carme Adán ha asegurado que para su formación es importante la carga de trabajo pero ha mostrado su apoyo a la iniciativa de AGE, porque ya basta de que para el PP "competitividad signifique reducción salarial".

Por el Grupo Mixto Consuelo Martínez ha reclamado apostar por la competitividad "basada en la calidad y no por la precarización, ya que siempre habrá quien produzca más barato".

Tras el debate de la iniciativa, el secretario general de Comisiones Obreras Industria, Víctor Lado, ha afirmado en los pasillos del Parlamento que la situación de PSA "no tiene nada que ver" con lo anunciado por Núñez Feijóo y que, si se adjudica el modelo, "no es por una gestión de la Xunta, sino por el sacrificio de los trabajadores", tanto los que hay ahora como los que entren en el futuro.

Lado ha mostrado su alegría por la adjudicación a la planta de PSA, pero ha dicho que se debe a unas condiciones de juego "fúnebres y dramáticas" para los trabajadores y con salarios que "en el futuro no llegarán a 1.000 euros".

También ha dicho que el futuro de la planta no está blindado, ya que la planta tiene dos líneas de producción y capacidad para hacer medio millón de vehículos al año, por lo que este contrato "no da garantía de trabajo para la totalidad de la plantilla. Es mentira", exclamó.

Lado ha denunciado, además, la posible deslocalización de la industria auxiliar que conllevará el compromiso en la reducción de costes y que se verá agravado por la decisión de disponer de piezas en un plazo de hasta siete días.