Las dos manifestaciones celebradas hoy en Vigo contra la reforma laboral han reunido a más de 100.000 personas, según los datos recabados por la Policía Local.
La marcha central fue la convocada por los sindicatos CC OO y UGT, que partía pasadas las once de la mañana del cruce de las calles Gran Vía y Venezuela. Allí estuvieron los líderes en Galicia de UGT, José Antonio Gómez, y el de CC OO, José Manuel Sánchez Aguión, que han cifrado el seguimiento del paro en un 90 por ciento.
La manifestación daba comienzo con una traca de petardos de varios metros de largo situada en plena Gran Vía viguesa, un sonoro estruendo "para que aprendan a respetar nuestros derechos", señalaron los sindicalistas.
En declaraciones a los medios, Gómez ha manifestado que los trabajadores gallegos "están dando una respuesta clara, masiva y contundente" a la reforma laboral, ejerciendo "de forma pacífica el derecho a la huelga". Además, ha alertado de que "la vía de la conflictividad social está abierta" y ha asegurado que no piensan "parar hasta tumbar la reforma laboral".
Mientras, Sánchez Aguión, ha calificado la manifestación como "histórica" y ha dicho que sirve para decir al Gobierno "que no paramos". "Esta reforma no sirve más que para la pérdida de derechos y no va a generar empleos", sino que se van a "destruir más de 650.000 puestos de trabajo", ha comentado el líder sindical.
En la protesta también figuraron dirigentes políticos como el líder del PSdeG, Pachi Vázquez o el alcalde vigués, el también socialista Abel Caballero, así como la exministra Elena Espinosa.
Vázquez ha declarado a los periodistas que "miles de mujeres y hombres de Galicia" quieren "decir no" a una reforma laboral que solo es "una máquina de destruir empleo y derechos sociales". "No vamos a permitir que una crisis que no provocaron los trabajadores la paguen ellos", ha señalado.
Mientras, el alcalde vigués ha incidido en su "apoyo" a la huelga y ha comentado que, con este gesto, se ponen "al lado de los trabajadores". Ha pedido además, una "salida progresista" a la crisis y que el Gobierno central "reoriente" sus políticas.
En la pancarta de cabecera de esta movilización, se podía leer el lema Quieren acabar con todo, con nuestros derechos sociales y laborales. Los manifestantes corearon consignas como Botín cabrón, trabaja de peón, No falta dinero, sobran ladrones o Los parados comen hipoteca, mientras los banqueros dan la receta.
La manifestación recorría las calles Gran Vía, Urzáiz y Colón, para culminar frente a la sede de la Xunta, en la zona portuaria de la ciudad viguesa.
LA CIG, TAMBIÉN PRESENTE
Seguidamente, a las 12:00 horas, partió de A Doblada la protesta de la CIG, con unos 16.500 participantes, según los datos aportados por el Concello vigués.
Asistieron a esta manifestación el portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, y el líder local del partido, Santiago Domínguez.
En ambas movilizaciones se corearon consignas contra el Gobierno de Mariano Rajoy y contra el poder financiero.
