La mayoría de los concellos evitan subir a la ciudadanía las tasas más habituales

Vecinos de Cervo, en las oficinas municipales (Foto: Antonio López)
photo_camera Vecinos de Cervo, en las oficinas municipales (Foto: Antonio López)

La subida generalizada del coste de la vida, que está viniendo acompañada de un descenso de ingresos y un incremento alarmante de las tasas de paro hace que la mayor parte de los alcaldes mariñanos estén tratando de dejar al margen de las subidas lo que la ciudadanía paga por las tasas más habituales. Como curiosidad, entre 2010 y 2011, antes de las elecciones, no se produjo prácticamente ninguna subida de tasas o impuestos, salvo excepciones muy puntuales. Hay otros casos llamativos, como por ejemplo los de Burela y Cervo con el agua, donde en el último año el recibo se disparó como consecuencia de la entrada en vigor de una nueva depuradora.

Uno de los que siempre presumió de que no subiría los impuestos a su vecindario fue el alcalde de Burela, el popular José María González Barcia. En 2011 el impuesto de vehículos subió un 3% y ahora se actualizará el IPC. Justifica, como su vecino cervense Alfonso Villares, la subida del agua porque tienen que asumir la gestión de la nueva depuradora. El incremento fue de un 120 por ciento. En Cervo sí hubo una subida destacada, que fue la del 18% del impuesto de vehículos, aunque no se toca ni el Ibi ni el Impuesto de Actividades Económicas (IAE).

Hace unos días se vivió uno de los episodios más sorprendentes a este respecto en la zona, ya que el gobierno del PP planteó una subida generalizada de las tasas e impuestos municipales que la oposición, que tiene mayoría de concejales, abortó con sus votos. El alcalde, José Lamela, advirtió que la decisión de la oposición es «pura demagoxia» y recordó que la situación económica del Concello exige que se incrementen esas tasas para poder mantener la liquidez e ir paliando la deuda que se fue acumulando.

La polémica en este asunto no fue patrimonio exclusivo del caso de O Valadouro. En Viveiro, el Impuesto de Bienes Inmuebles se incrementa en un 3,88 por ciento, en tanto que el rústico continúa igual. El impuesto de vehículos también se revisó al alza, con un 4%. El IAE, en cambio, permanece en el mismo baremo.

Al igual que en O Valadouro, el alcalde, en este caso el socialista Melchor Roel, indicó que la situación económica del Concello es tan grave que obliga a ir modificando las tasas e impuestos porque de otro modo no podrán ir recortando las deudas con sus proveedores, que dice que es lo que más le preocupa porque afecta a la supervivencia de pequeñas y medianas empresas del municipio.

En Barreiros, sí se revisaron al alza varias de estas tasas. El Ibi pasó del 0,6 al 0,3 el urbano y del 0,3 al 0,6 el rústico. El impuesto de vehículos subió un 10% y el alcalde, Alfonso Fuente, lo justificó porque recordó que en algunos casos hacía 22 años que no se revisaban esas tasas.

Xove, en otros tiempos paradigma del Concello con muchos recursos, no corrigió el Ibi ni el IAE, que subirán solo el IPC, tal y como marca la ley, pero se vio obligado a subir en un 18 por ciento el impuesto sobre vehículos de tracción mecánica.

Sin incrementos

Otra situación peculiar se da en el municipio de Riotorto. Allí su alcalde, el nacionalista Federico Gutiérrez Estoa, anticipa que no solo no va a subir las tasas e impuestos a los riotortenses, sino que además «non teño pensado subilos tampouco noutros anos» y anticipa que en tanto la economía municipal pueda resistir no quiere «cargar ós veciños e veciñas con máis gastos».

A pesar de la mala situación económica generalizada por la que atraviesan la mayor parte de los municipios, son muchos los que todavía no adoptaron una decisión sobre esta cuestión. Así, por ejemplo en Foz este asunto no se trató, como tampoco en O Vicedo, A Pontenova o Trabada. En Foz existe además el problema de la inestabilidad política de la corporación, incluso con amenazas al alcalde referidas a la presentación de una cuestión de confianza.

Uno de los municipios con más problemas económicos es Mondoñedo. Aún así su alcalde, Orlando González, del BNG, indica que no tienen decidido aún lo que harán al respecto.

DECISIONES
La ausencia de subidas se palía con recortes

Son muchos los alcaldes que deciden no subir los impuestos básicos pero a cambio aplican recortes en otros ámbitos. Por ejemplo estos días en Burela hay abundantes críticas por la situación de la banda de música.

3,1 subida del IPC

El Índice de Precios al Consumo se prevé que suba este año en torno a un 3,1%, así que esa subida será ineludible, por ley, para todas las tasas.

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