La mayor parte de Ribeira Sacra se tiñe del color de los populares

El mapa político en la Ribeira Sacra apenas ha sufrido cambios después de la celebración de las elecciones municipales. El Partido Popular (PP) continúa siendo la formación hegemónica en el sur lucense, donde estará al frente de ocho de los doce municipios de las comarcas Terra de Lemos. Chantada y Quiroga. Los únicos gobiernos que, con casi total seguridad no estarán en manos de los populares, serán los de Monforte y A Pobra do Brollón, donde sus alcaldes, casi con total seguridad, serán nacionalistas; y Ribas de Sil, con el PSOE al frente.

En O Saviñao continuará Joaquín González González, que pasó de seis a siete concejales. Los socialistas mantuvieron los cuatro y de la corporación desaparece por primera vez desde 1991 el BNG. En el municipio achacan tal circunstancia a que el cabeza de lista de los nacionalistas es una persona poco conocida y que no tiene el tirón del histórico Xosé Manuel Rodríguez. Joaquín González asumirá su sexto mandato consecutivo. Llegó a la alcaldía hace 20 años, gobernando en minoría (seis concejales) hasta 1995 gracias a que PSOE y BNG (siete en total) no habían llegado a un acuerdo para montar un bipartito.

Sober será gobernado por Luis Fernández Guitián, también del PP y nuevo en estas lides, aunque lo hará con un concejal menos al bajar de ocho a siete. Lo socialistas crecen en votos y logran dos ediles, uno más que en 2007; mientras que el BNG se mantiene con dos concejales.

El popular José Luis Álvarez afronta su segundo mandato consecutivo en Pantón. Obtuvo mejores resultados que hace cuatro años, ya que pasó de seis a siete concejales. De esta manera, se consolida como líder del PP en el municipio y hace olvidar a muchos la figura de José Manuel Ledo, alcalde desde 1987 a 2007. En Pantón, los socialistas perdieron un edil y el BNG logró mantener el que tenía.

Por lo que respecta a Bóveda, el también popular José Manuel Arias ha ganado por cuarta vez consecutiva las elecciones, incluso subiendo en papeletas y ediles. Los seis conseguidos le darán tranquilidad al doblar la suma de los del PSOE (dos) y BNG (uno).

En la comarca chantadina, los populares tienen el control en Carballedo y Taboada. En este último municipio, Ramiro Moure Ansoar, que cogió las riendas del Ayuntamiento hace dos años al dimitir Ramiro Moure tras acceder a la jefatura provincial de Educación de la Xunta, logró como candidato del PP mejores resultados que los obtenidos en 2007, al pasar de seis a siete ediles. Los socialistas también aumentan de dos a tres y el BNG pierde dos y se queda con uno.

El acceso a la alcaldía de O Courel de Lola Castro hace algo más de año y medio gracias a una moción de censura que apoyó un díscolo del PSOE le ha servido a esta para rentabilizar su corta estancia en el sillón municipal. El pasado domingo logró el 54,25% de los votos válidos emitidos (en 2007 sólo había logrado el 38,27%) y la mayoría, cinco concejales. Los socialistas, que estuvieron gobernando entre mayo de 1999 y octubre del 2009 recibieron un fuerte varapalo, pues el 37,82% de las papeletas únicamente le aportaron cuatro ediles.

Lola Castro ha indicado que su victoria ha sido posible gracias a que, aseguró, «por primeira vez houbo democracia no Courel» y a que los vecinos «déronse conta que hai outra forma de gobernar, ademais de estar fartos das ameazas de José López Fontal», el candidato socialista

Los otros

En la ciudad del Cabe, Severino Rodríguez Díaz, del BNG, dispone de dos opciones para llevar las riendas del Ayuntamiento. Una es pactando con los socialistas, como ya hizo en el 2003, en su primer mandato; y otra confiándose al hecho de ser la lista más votada. Sus siete concejales, por los seis del PP y los cuatro del PSOE, serían suficientes para ello, ya que se descarta que el PSOE llegue a apoyar a los populares para que éstos se hagan con el mando.

Una situación similar se da en A Pobra do Brollón, donde la candidatura que obtuvo un mayor respaldo de los vecinos es la del BNG. Consiguió cuatro, subiendo uno con respecto al 2007. Por detrás de los nacionalistas quedaron los independientes, con tres; y el PP y el PSOE, ambos con dos.

El nacionalista José Luis Maceda Vilariño opta a la reelección siempre que el PSOE lo apoye y forme gobierno de coalición, como en los últimos cuatro años, o se abstenga de respaldar a los independientes, cuyo cabeza de lista es un díscolo del Partido Popular.

El caso de Chantada es más complicado. Bloque y PSOE suman cinco concejales, insuficientes para montar un gobierno bipartito, como el del periodo 2007/2001. El grupo independiente liderado por otro díscolo del PP, Manuel Lorenzo Varela, dispone de un número similar de ediles, quedándose la agrupación popular con sólo tres. Aquí, Varela parte con ventaja, ya que su lista es la lista más votada y podría llegar a buscar apoyos puntuales o incluso un pacto con el BNG (está totalmente descartado que lo haga con el PP) para gobernar.

En Ribas de Sil continuará el socialista Miguel Sotuela. Llegó a la alcaldía en marzo de 1998 tras una moción de censura contra el PP que había ganado gracias al apoyo de dos concejales de este último partido. En los comicios de 1999, 2003, 2007 y los del pasado domingo consiguió la mayoría absoluta.

Miguel Sotuela lleva las dos últimas citas electorales municipales ganando de forma holgada, no como en las anteriores, cuando la diferencia con el PP era de un puñado de votos.

Resultados

• En O Courel hay poca abstención. Los vecinos de O Courel fueron los que en mayor número participaron en las elecciones del pasado domingo, ya que el porcentaje de abstención fue del 7,65%. Le sigue Bóveda, con un 14,65%. Monforte lideró esta lista, al no acudir a votar el 29,45% de los vecinos censados.
• En blanco y nulos. En la ciudad del Cabe también fue donde se registró un mayor número de papeletas nulas y en blanco, con un 1,94 y un 1,96%, respectivamente. Los residentes en Ribas de Sil fueron detrás, con un 1,62 y un 1,52%.