Mirta Rodríguez, madre de Antonio Guerrero, uno de los cinco cubanos detenidos en Miami en el año 1998 y acusados de espionaje, visitó ayer el municipio de Láncara, donde reclamó la puesta en libertad de su hijo, que cumple una condena de 21 años y diez meses de prisión.
La mujer recorre estos días diversos lugares de la geografía española buscando apoyos a su causa. «Mi objetivo es esclarecer la verdad sobre la condena de mi hijo, que es inocente de todo lo que se le acusa», afirmó.
El grupo de Los Cinco está conformado por Antonio Guerrero, Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Fernando González Llort y René González, todos ellos detenidos el 12 de septiembre de 1998 por el FBI en Estados Unidos, donde fueron condenados por «conspiración para cometer espionaje» a favor del entonces gobierno de Fidel Castro. Hasta la fecha, solo René González fue excarcelado.
Desde hace 13 años, el Gobierno cubano mantiene una intensa campaña internacional por la libertad de estos hombres, considerados «héroes» en su país y víctimas de un proceso injusto.
