Las líneas eléctricas de alta tensión Boimente-Pesoz y Cartelle, en las que el paso del temporal Kurt a principios del pasado mes de febrero, derribó varias torres, están siendo reparadas y volverán a transportar energía en aproximadamente un mes, según confirmaron directivos de la empresa Red Eléctrica Española (REE).
Los fuertes vientos habían abatido siete apoyos en los altos pontevedreses del Candal, en Forcarei y otros diez en A Cadeira, entre los municipios de Trabada y Lourenzá. En esos días ninguna de las subestaciones de transporte de electricidad quedó sin suministro, pero los daños que ocasionaron las rachas de viento en las redes de distribución de las compañías dejaron sin servicio a miles de usuarios durante varias horas.
La directora general de Transporte de Red Eléctrica, Eva Pagán, señaló que «por reglamento nuestras líneas deben poder soportar vientos de hasta 140 kilómetros por hora e incluso las reforzamos para que soporten intensidades más fuertes, pero es que en esas horas fuertes del temporal hubo medidores eólicos cercanos que registraron hasta 200 kilómetros por hora antes de desaparecer arrastrados».
La fuerza de Kurt al barrer Galicia fue tal que toda la potencia eólica gallega, unos 4.000 megavatios, quedó sin operar. Pese al rosario de averías en la líneas locales de baja tensión el sistema general no se cayó, sostenido por la producción de los embalses, las centrales de ciclo combinado, las térmicas y las nucleares.
La dirección del viento sobre la línea mariñana favoreció los derribos de torres, que están siendo reconstruidas con un 30% más de resistencia en cimentación y montantes (un 25% más en la pontevedresa que ya se había visto muy afectada por el tifón Klaus de hace años) y REE considera que el mallado de la red, con otras muchas secundarias que permiten distribuir por otros lados, aporta seguridad y «es de muy alto nivel», según Miguel Duvison, director general de Operaciones.
INVERSIONES. Las inversiones en Galicia hasta 2020, por 308 millones de euros presupuestados, se centrarán ahora en las mejoras para abastecer A Coruña, por más de 60 millones de euros y el proyecto de interconexión con Portugal desde Arbo, pendiente de superar la tramitación ambiental, además del abastecimiento del Ave entre Zamora y Ourense, como los más importantes.
En el enlace de doble circuito Pesoz-Boimente entre Lugo y Asturias, de 81,6 kilómetros, REE invirtió 46,5 millones de euros para reforzar la cornisa cantábrica y evacuar la energía eólica.
