La fase de instrucción por el doble crimen de Burgás, en el que fueron asesinados Víctor Hermida Purriños, de 75 años, y su hijo Eulogio, de 51, finalizó ayer con la celebración de la audiencia preliminar en el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Vilalba. Se cierra así el periodo de recopilación de pruebas y testigos, que se inició hace casi dos años, concretamente el 22 de febrero de 2012, cuando se consumaron los hechos en el lugar de Casas Novas de la parroquia xermadesa de Roupar.
Al acto procesal de ayer estaba previsto que acudieran los dos acusados por este doble crimen, los vilalbeses Juan José Calaza, ‘El Pibe’, y Brais Lozano -ambos en prisión desde el 22 de mayo de 2012, tres días después de su detención- pero finalmente la jueza no los citó, ya que estaban representados por sus abogados.
Más de 3.000 folios de informes y pruebas
La magnitud del doble crimen de Burgás no se mide solo por sus tremendas consecuencias, sino también por la cantidad de documentación, informes, pruebas, actas y autos que se recopilaron en torno a este suceso y que quedaron recogidas en los más de 3.000 folios que forman el expediente del caso.
