Estudió Historia en Santiago y, tras participar varios años como voluntario en excavaciones arqueológicas de Portugal, descubrió que había un salto de gigante entre los historiadores y la gente que quiere saber. Y ahí, en esa distancia, se situó para crear la empresa HISPT (Historia para todos), un proyecto que trata de acercar el pasado a todo el mundo a través de recreaciones en 3D y actividades interactivas.
«La primera vez que fui de voluntario a una excavación me di cuenta de que la gente no se enteraba demasiado de qué estaba viendo. Y se nos ocurrió recrearla», relata. «La gente tiene interés, pero no entiende», dice un emprendedor autodidacta que reconoce que, aunque la financiación facilitaría el trabajo, lo que necesita su proyecto son horas.
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