La Generalitat ha ampliado el recurso al Tribunal Constitucional (TC) por la impugnación del 9N por parte del Estado, añadiendo declaraciones del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y del ministro de Justicia, Rafael Catalá, en las que, según el Govern, "admiten que no es consulta ni referéndum".
Los servicios jurídicos de la Generalitat de Cataluña presentaron a finales de la semana pasada un recurso ante el TC en el que le solicitaban que "reconsidere y deje sin efecto" la admisión a trámite de la impugnación del proceso de participación del 9N presentada por el Gobierno central.
Las manifestaciones de Rajoy y Catalá "evidencian", según ha relatado el gobierno catalán en un comunicado, que "el Gobierno ya ha admitido estos últimos días que el proceso participativo del 9N tiene una naturaleza diferente de la que se le atribuyó cuando lo impugnaron y, en cualquier caso, está falto de efectos jurídicos".
Por ello, ha presentado esta mañana una ampliación del recurso entregado el viernes día 7, en el que además se pedía, en caso de no ser admitido a trámite el recurso, una aclaración de la providencia del TC porque "resultaba confusa, tanto por lo que se refiere a su objeto como su a su alcance".
En el escrito se aportan así declaraciones públicas efectuadas este fin de semana por Rajoy y Catalá, que en opinión de la Generalitat "evidencian que el Gobierno ha cambiado de opinión y ya no considera el 9N ni una consulta ni un referéndum, tal como ha admitido Mariano Rajoy".
El Govern recuerda que, "según recogen los medios", Rajoy se expresó con "meridiana claridad" en Cáceres, donde afirmó que "lo de mañana no sé cómo se le puede llamar, pero no es ni un referéndum ni una consulta, ni nada que se le parezca. No lo es porque no se produce efecto alguno", explica el comunicado de la Generalitat, que también apunta que el mandatarario reiteró "se le podrá llamar como se quiera, pero ni es un referéndum, ni es una consulta, ni nada que se le parezca".
Respecto al ministro de Justicia, la Generalitat apunta que éste "reconoció" que el 9N no era consulta ni referéndum, al decir que "estamos pues ante un acto de pura propaganda que carece de efectos jurídicos", unas declaraciones que la Generalitat considera "relevantes, tratándose del titular de Justicia".
El escrito presentado argumenta que las últimas manifestaciones de ambos dirigentes populares "muestran que el Gobierno ha admitido reiteradamente que el proceso participativo del 9N tiene una naturaleza diferente de aquella que se le atribuyó cuando se impugnó y, en cualquier caso, está falto de efectos jurídicos".
El objetivo de dicho escrito es así "ofrecer más claridad sobre la naturaleza de las actuaciones impugnadas y facilitar la valoración de las objeciones de admisibilidad formuladas por la Generalitat en el recurso del viernes pasado".
