La firma de limpieza del colegio Frei Luis recurre la rescisión del contrato

La empresa que se encargaba del servicio de limpieza en el colegio Frei Luis de Granada de Sarria recurrió ante el Ayuntamiento la rescisión de su contrato, el cual estaba en vigor desde hacía más de tres décadas. Desde el pasado 1 de diciembre pasó a realizar esta labor la firma que resultó adjudicataria en el concurso convocado por el Concello, Pulmar Deza, aunque la empresa sostiene que sigue vigente su contrato al renovarse automáticamente en septiembre por un año.

La recurrente era titular de la concesión desde 1980 y a partir de ese año se venía renovando "de forma tácita y con carácter anual todos los 5 de septiembre". Por ello, entiende que en 2016 se le volvió a renovar y desde entonces "venía prestando los servicios sin que nadie me hubiese notificado ninguna circunstancia que impidiese la renovación", indica el antigua firma.

Según la versión de la empresa, el pasado noviembre recibió una comunicación del Ayuntamiento en la que se le indica que desde el 1 de diciembre el trabajo que venía realizando se llevará a cabo por la nueva adjudicataria. La antigua concesionaria considera que su contrato está en vigor al menos hasta el próximo 4 de septiembre. "Si se hubiese manifestado la negativa a prorrogar la concesión antes del 5 de septiembre, habría dejado automáticamente de prestar los servicios, pero una vez prorrogado se genera el derecho a continuar un año", manifiesta la empresa en un escrito que registró en el consistorio en noviembre.

La firma se muestra también molesta con la forma del Ayuntamiento de comunicar la rescisión de la concesión. Asegura que debería adoptarse una resolución con la posibilidad de alegar y recurrir. "Se prescinde total y absolutamente del procedimiento establecido y se genera una clara indefensión", apunta. La empresa denuncia que por ahora no recibió respuesta a su escrito y no descarta tomar medidas por la vía judicial.

La polémica en el servicio de limpieza de dependencias municipales y centros educativos comenzó en abril, cuando el Concello lo sacó a licitación. Entonces generó malestar porque el servicio era desempeñado en algunos casos desde hacía 40 años por empresas familiares del municipio y autónomas. La alcaldesa alegó entonces que se trataba de un contrato mayor y que había que licitarlo.

CONCURSO. Tras sacarse a concurso, las empresas que desempeñaban este servicio en los colegios Antonio Fernández López de Oural y Frei Luis de Granada presentaron sendas reclamaciones alegando que en las bases de licitación no se incluía la relación de trabajadores que realizaban la limpieza y que las nuevas adjudicatarias tenían que contratar. Esto llevó a que el Concello anulara las bases, adjuntara la relación de empleados y volviera a sacar a licitación el servicio el pasado junio.

La empresa que se encargaba del colegio Frei Luis de Granada impugnó de nuevo las bases argumentando que el procedimiento presentaba "irregularidades". Consideraba que, antes de sacar a licitación el servicio, el Ayuntamiento debería rescindir las concesiones, lo que entonces aseguró que no se llevó a cabo. Finalmente el servicio de limpieza fue adjudicado y se rescindieron los contratos a las anteriores empresas.