La Feira do Capón abarrota Vilalba y agota los 1.100 ejemplares en venta

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La Feira do Capón de Vilalba no falló a las expectativas que los organizadores de esta tradicional cita habían depositado en esta edición de la feria, en la que la crisis económica no hizo ni tan siquiera acto de presencia, puesto que los más de 1.000 ejemplares de capón que se pusieron a la venta volaron en apenas un par de horas y con cotizaciones en ascenso que llegaron a alcanzar los 200 euros por la pareja, según indicó el presidente de la Asociación de Criadores, Gonzalo Hermida.

El frío, casi polar, que presidió este domingo la mañana vilalbesa no fue más que un aliado de cara agilizar las transacciones, muchas de las cuales ya estaban cerradas antes incluso de que los criadores transportasen sus capones hasta la Praza da Constitución, donde el Ayuntamiento, a diferencia de otros años, había instalado una inmensa carpa —con una superficie de 800 metros cuadrados— que fue una auténtica marea humana. Por esta inmensa carpa desfilaron además de curiosos, compradores y vendedores,el alcalde de Vilalba, Gerardo Criado; y otros dirigentes políticos, tales como el conselleiro de Traballo, Ricardo Varela, el delegado provincial de Medio Ambiente, Eduardo Vidal Baamonde, y el de Medio Rural, Emilio López Pérez, que luego participó en la entrega de premios.

La jornada ferial, amenizada desde primera hora de la mañana por la música de la banda local, así como por el siempre amable soniquete de las Pandereteiras de Andrade congregó este domingo a miles de personas, que dieron vida y mucho colorido al casco urbano de la capital chairega, cuya hostelería también vivió una jornada muy próspera ante la continuada avalancha de personas.

Una bonanza similar fue la que experimentaron en sus propios bolsillos los criadores, que, alejados de los malos augurios asociados a la situación económica actual, despacharon sus ejemplares de capones a precios que oscilaron entre 80 y 100 euros el ejemplar, por lo que la pareja se llegó a cotizar a 200 euros, según constató el presidente de la Asocaición de Criadores de Capón de Vilalba, Gonzalo Hermida, que apuntó también un ligero incremento del precio de este producto "de calidad".

Disuelto ya el mercado del capón y cuando sólo la masiva presencia de público daba vida a un recinto del que ya había desaparecido la mercancía en venta, el regidor chairego, Gerardo Criado; el delegado de Medio Rural, Emilio López Pérez, y el director xeral de Industrias Agroalimentarias, Xosé Mouriño Cuba, procedieron a la entrega de premios a la mejor cesta, el mejor ejemplar y la mejor pareja, a cuyos afortunados obsequiaron con distintos galardones en metálico, cuyo importe ascendió a 650 euros.

María del Carmen Barro, de Lanzós, se llevó el premio al mejor par de capones, mientras que Milagros Lozano, de Distriz, fue agasajada por la mejor cesta, al igual que Oliva Santos, de Distriz, que recibió 300 euros por el mejor par de capones, "un producto exclusivo e identificativo de Vilalba, que no sufrió para nada los efectos de la crisis", sentenció Criado, mientras que López Pérez también elogió la calidad del capón y "a las mujeres que hacen posible este producto".

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