La llegada del verano y de las citas gastronómicas es todo uno. Ayer mismo se celebraron dos de las fiestas de este tipo con más arraigo de la comarca y que, año tras año, van sumando adeptos: la Feira do Bonito de Burela y la Festa do Percebe de Rinlo. La intensa tormenta que se desató a mediodía no impidió que miles de personas se acercaran tanto a la localidad burelesa como a la rinlega para disfrutar de dos de los productos del mar más característicos de la zona. Desde el mediodía y hasta ya entrada la noche, los organizadores de ambas citas sirvieron raciones hasta alcanzar cifras que siguen sorprendiendo cada año.
La trigésima edición de la Feira do Bonito de Burela finalizó con