Todavía falta para el San Juan, pero hay preocupación porque la protagonista, un año más, se resista a aparecer. La escasez de sardina, un fenómeno habitual desde 2010, inquieta al cerco en el arranque de la campaña.
Ramón José, el patrón del barco Jesús Dolores, una de las embarcaciones que faena esta especie en la comarca, señala que en lo que va de año han recogido «uns 6.500 kilos», que obtuvieron en un par de noches del pasado mes de mayo.
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