La denominación de origen Ribeira Sacra amparará este año el embotellado de 3.687.679 litros de vino, frente a los más de 4.735.000 que se pusieron en el mercado el año pasado. El descenso, cercano al 22%, viene motivado porque la cosecha de 2011 fue excepcional en cantidad, pues el nivel medio está entre 3,7 y 3,5 millones de litros desde que en 2009 se alcanzó esa última cifra, después de que en el 2008 fuese un poco superior a 2,6.
El consejo regulador aprobó el balance del año pasado en una reciente asamblea, en la que se constató que la recogida de uva final fue de 5.452.206 kilos, frente a los casi 7 del 2011.