Una vez que los barcos de cerco llegaron a su cuota máxima en la costera de la caballa, las otras dos modalidades pesqueras presentes -arrastre y anzuelo- continuarán en la costa cantábrica hasta la próxima semana, si se cumplen las previsiones.
Ninguno de estos métodos ha agotado el reducido cupo de este año aunque sí ha aumentado la competencia. «Hai moitísimos máis barcos este ano que en anteriores ocasións, pero o problema xa non é a competencia, senón o cupo que temos», señaló Basilio Otero, patrón mayor de Burela. Los barcos mariñanos cuentan con una gran presencia desde Gijón hasta Santoña, y se calcula que de toda Galicia podría haber un centenar de embarcaciones, de las cuales A Mariña ocupa el mayor porcentaje.
El arrastre es la modalidad pesquera que menos tiempo lleva trabajando en la caballa, «apenas semana ou semana e media», indicó Otero. El cupo para esta técnica es de 6.700 toneladas, y por el momento se lleva capturado un poco más del 20%. En cuanto al anzuelo los barcos disponen de un máximo de 7.200 toneladas y aunque aún no hay datos actualizados, debido a que hay dificultades en la comunicación con Madrid, a principio de semana se había llegado al 35% del cupo, por lo que se estima que hoy ese porcentaje podría situarse en torno al 50%. En este caso los barcos de anzuelo llevan ya tres semanas en la costera.
Precio
El nivel de capturas, pese a la limitación por el cupo, está siendo buena para los barcos mariñanos y otra noticia positiva está en el precio de venta del kilo de caballa, que se sitúa en una media cercana a los 20 euros, una cantidad similar a la del año pasado, en el que se redujo significativamente el límite máximo.
En verano se abrirá de nuevo la pesquería y se podrán capturar en torno a 5.000 toneladas a repartir entre arrastre y anzuelo.
