Sin tiempo a la recuperación del temporal de la noche del sábado, los fenómenos meteorológicos adversos volverán a repetirse durante toda esta semana en el litoral de la comarca. Para hoy ya se esperan vientos muy fuertes de componente sur que a partir del mediodía podrían superar incluso los 140 kilómetros por hora según algunos pronósticos. Ante esta circunstancia desde la Agencia Estatal de Meteorología Aemet avisa del peligro con alerta roja por rachas muy fuertes hasta la noche de hoy. Además, mañana el viento volverá a arreciar creando áreas de mar arbolada en altamar y las olas podrían volver a superar incluso los diez metros, apuntan portales como windguru, aunque esta vez la mar de fondo procederá del oeste-noroeste por lo que en principio la fuerza de las olas no debería tener la repercusión en la comarca del fin de semana. Los vientos muy fuertes cuyas rachas podrían volver a alcanzar los parámetros de hoy se repetirán el jueves y la mar de fondo volverá a llegar a los siete metros el sábado.
El oceanógrafo y surfista Tony Butt, afincado en el occidente asturiano y buen conocedor de las olas mariñanas explica que esta sucesión de fuertes temporales que se repiten desde el año pasado, «no es una circunstancia habitual, desde el 13 de diciembre hay grandes mares que se repiten, es como una cadena que se retroalimenta, un circulo vicioso». Butt explica que en el océano existe un patrón fluido que se prolonga normalmente en periodos de entre diez días y un mes «después habitualmente interviene un anticiclón que se encarga de romperlo y la situación en el mar se normaliza, cosa que no ha sucedido», apunta Butt. El oceanógrafo indica que este año la atmósfera en el Atlántico Norte, que es donde se crean las grandes borrascas que producen las olas que llegan a la costa del Cantábrico, «se ha quedado bloqueada y las borrascas se realimentan unas tras otras sin parar», dice el surfista.
Un día más la flota amarrada a puerto
La práctica totalidad de la flota pesquera volvió a quedar amarrada a puerto ayer, tan solo contadas embarcaciones de artes menores faenaron. Mientras que en Celeiro el arrastre de litoral regresó poco después del mediodía a puerto por el mal tiempo, en Burela tanto arrastreros locales como foráneos no trabajaron. El patrón mayor de Foz, Juan José Lestegás, explicó que muchas lanchas decidieron amarrar porque «aunque la mar mejoró, el pronóstico es malo y no nos arriesgamos a no poder recoger los aparejos».
