Iris Castro Meitín fue un ejemplo de coraje hasta el último de sus días, un final que llegó demasiado pronto para este mujer, que falleció el pasado jueves a los 59 años de edad al no poder superar una dura enfermedad ante la que nunca se rindió.
Un ejemplo de lucha, que fue una constante en su vida, buena parte de la cual la dedicó a trabajar para mejorar el presente y el futuro de las personas que padecen una enfermedad mental, una dolencia que sufrió en carne propia ya que dos de sus cinco hijos la padecen.
Esta fuerza la llevó, partiendo de cero, a crear en 1999 la Asociación de Axuda ao Enfermo Mental A Mariña pudiendo abrir, años más tarde, su primer centro ocupacional en Burela, localidad en la que también se puso en marcha poco después un piso tulelado.
La asociación seguía creciendo y lograba abrir otro centro en Ribadeo, pero aunque lo fácil hubiera sido quedarse ahí, Iris apostó con todas sus fuerzas por ir a más y aunque a veces esas fuerzas fueron a menos por la enfermedad y la crisis, pudo ver cumplido su sueño de abrir una unidad asistencial en Cervo, siendo hasta el momento la única residencia en la provincia para las personas con una enfermedad mental.
No fue fácil, tuvo que llamar y rellamar a muchas puertas, pero ella nunca se rindió, como nunca lo hizo ante las zancadillas de la vida y hasta en los peores momentos siempre tuvo una sonrisa de ánimo para todos, tal y como recuerdan sus colaboradores, que no pueden olvidar que fue y es el alma mater de la asociación, cuya presidencia nunca abandonó.
El entierro se celebrará a las cinco de esta tarde en la iglesia parroquial de San Pedro de Xuances, en Xove, hacia donde saldrá el féretro desde el tanatorio xovense, en el que ayer fue velada por familia, amigos y allegados.
