La capital lucense ampliará su oferta hotelera con un céntrico cuatro estrellas que se ubicará en la antigua residencia que tenía el colegio de la Compañía de María —actualmente María Auxiliadora—, en el cruce de la avenida Ramón Ferreiro con la calle Marina Española. Este es la ambiciosa iniciativa empresarial que llevará a cabo el grupo de restauración Oktonal, cuyo administrador único es el lucense Dámaso Expósito Guerra, que acaba de adquirir este inmueble que tiene casi medio siglo de vida.
"Es un proyecto importante para Lugo y una decidida apuesta de la empresa, que pretende aportar mucho a nivel turístico", afirma Dámaso Expósito, que resalta además la inyección que supondrá para el mercado laboral del sector, pues supondrá la creación de 30 puestos de trabajo directos.
Este empresario, que gestiona otros tres negocios de hostelería en la capital lucense, prevé que este cuatro estrellas puede estar en servicio dentro de un año y medio, en mayo de 2019. La parcela en donde se ubica tiene unos 5.000 metros cuadrados de superficie, de los que 3.900 están ocupados por un frondoso jardín, "un pulmón verde", según destaca Dámaso Expósito, que acondicionará para acoger celebraciones y eventos.
El proyecto, que está pendiente de que el Concello de Lugo dé luz verde a la licencia de obras, contempla la rehabilitación integral del inmueble, de seis alturas, para albergar 90 habitaciones. Se vaciará su interior y se conservará la fachada.
Dámaso Expósito, empresario: "Está aumentando el turismo. Lugo necesita logística. Somos deficitarios en plazas hoteleras"
El hotel estará abanderado por una cadena presente en España. El grupo Oktonal, según señala su administrador único, negociará "con las principales enseñas hoteleras nacionales e internacionales".
MÁS SERVICIOS. Este cuatro estrellas también apostará con fuerza por la restauración. "Una oferta gastronómica de autor", a juicio de este empresario, con el fin de que "resalte la tradición gastronómica por la que Lugo es reconocida a nivel nacional".
También tiene previsto acondicionar un aparcamiento público con unas 80 plazas, que, según indica Dámaso Expósito, "contribuirá a la descongestión del tráfico", uno de los problemas que aprecia en la ciudad.
El acceso al complejo será por la calle Marina Española, en donde actualmente la parcela tiene un cierre de dos metros y medio de altura. Ese muro de piedra será demolido.
IMPULSO. El grupo Oktonal llevaba años estudiando cómo ampliar su negocio de la restauración con el de los alojamientos. Fue entonces, según cuenta su promotor, cuando surgió "esta oportunidad única" de la antigua residencia del colegio de la Compañía de María "con un pulmón verde en una zona céntrica".
Contribuyó también a que diese ese salto que Lugo recibiese el reconocimiento de la Unesco como Patrimonio de la Humanidad para otros dos bienes, la catedral y el Camino Primitivo, distinción que también ostenta la muralla romana. Este empresario explica que fue "el impulso" para apostar por abrir un hotel, al convivir, a su juicio, el binomio aumento de turistas y falta de plazas para acogerlos.
La capital lucense cuenta actualmente con una treintena de alojamientos, entre hoteles -cinco de ellos cuatro estrellas-, hostales y casas de turismo rural. En obras o en proyecto están además un apartahotel, en el polígono industrial de O Ceao; otro hotel, en el parque empresarial de As Gándaras, y al menos dos apartamentos turísticos en el recinto histórico.
