La Academia de Hollywood reacciona ante las acusaciones de racismo y promete "grandes cambios"

No es la primera vez que los grandes premios de la industria cinematográfica, los Oscar, se ven empañados por acusaciones de racismo, pero tal vez sea la última si nos atenemos a las declaraciones realizadas este martes por la presidenta de la Academia de Hollywood, la afroamericana Cheryl Boone Isaacs, quien se ha declarado "afligida y frustrada" por la falta de inclusión mostrada en las nominaciones, y ha prometido "grandes cambios".

Y es que, como ya ocurriera en 2015, este año tampoco hay ningún actor o actriz afroamericano en las nominaciones al Oscar, anunciadas el jueves pasado, lo que ha provocado amenazas de boicotear la ceremonia que se celebrará el próximo 28 de febrero en el teatro Dolby de Los Ángeles, como la llamada hecha por el director de cine Spike Lee, quien ha llamado a realizar un boicot contra la entrega del Oscar por "racista y discriminadora".

Ante estas acusaciones, la presidenta de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, la afroamericana Cheryl Boone Isaacs, ha reconocido en un comunicado que se siente frustrada. "Mientras celebramos logros extraordinarios, me siento a la vez con el corazón roto y frustrado por la falta de inclusión. Se trata de una difícil, pero importante conversación, y es hora de grandes cambios", prometió. Según asegura, la Academia está tomando "medidas drásticas" para alterar la composición de sus miembros, y en los próximos días y semanas se llevará a cabo una revisión de la captación de socios "con el fin de llevar la diversidad a nuestra clase de 2016 y más allá", destaca.