Otero mantuvo en secreto 20 días su cese como alcalde de Monterroso

El Tribunal Constitucional no admitió su recurso contra la condena de un año y un mes de inhabilitación que le impuso el Supremo por su implicación en el caso de la retirada de multas
Jesús Otero
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El hasta ahora alcalde de Monterroso, el independiente Jesús Otero, habría ocultado durante casi 20 días su cese el frente del gobierno local de Monterroso. El Tribunal Constitucional no admitió a trámite el recurso presentado por el regidor para librarse de la pena de un año, un mes y 15 días de inhabilitación al que lo había condenado el Supremo por su implicación en el caso de la retirada de multas de tráfico cuando era subdelegado del Gobierno.

Una vez que la sentencia se hizo firme, y que al regidor no le quedaba otra alternativa que cumplir la pena, presentó su cese el pasado 15 de octubre, aunque hasta ayer no se produjo ningún tipo de anuncio al respecto.

Durante este tiempo, Otero siguió trabajando con relativa normalidad al frente del Ayuntamiento, aunque disminuyó su presencia en actos públicos, en los que su ausencia era excusada argumentando motivos personales, y su figura, sustituida por la del que ahora se perfila como su sucesor, el concejal de cultura, Miguel Rico.

En declaraciones ayer a este medio, Jesús Otero no entró en los detalles que le llevaron a ocultar su cese. Sí señaló, sin embargo, que su inhabilitación no significará «sufrimiento alguno» en la gestión diaria del Ayuntamiento y definió su equipo de gobierno como «sólido y preparado», por lo que aseguró que su ausencia de la alcaldía no tendrá «ningún tipo de relevancia política».

Otero aseguró que, a partir de ahora, trabajará «como un ciudadano más» y que el cumplimiento de esta condena significará para él la obligación «de cogerme un año sabático». El hasta ahora regidor monterrosino también anunció que el próximo lunes, a las 19.00 horas, celebrará en el centro sociocultural una reunión en la que explicará a todos los vecinos que asistan los pormenores de este proceso, así como aclararles cualquier posible duda.

Otero también admitió que una vez que cumpla esta condena de inhabilitación por tráfico de influencias no podrá recuperar la alcaldía en el presente mandato, «ya que existe una sentencia de un tribunal de Asturias que falló que si alguien es cesado de un cargo público a causa de una condena no se podrá reincorporar de forma automática al mismo una vez que la haya cumplido».

En todo caso, mostró su predisposición, una vez que haya cumplido su inhabilitación, a regresar al gobierno local y colaborar con él «en el grado en el que se me pida». Tampoco descarta presentarse a otras elecciones encabezando de nuevo la lista de su partido.

Jesús Otero y Julio González fueron los únicos condenados por la Audiencia Provincial en el caso de la retirada de multas en la Jefatura de Tráfico de Lugo, que llegó a sentar en el banquillo de los acusados a una veintena de personas. La condena fue ratificada en su momento por el Tribunal Supremo, aunque con una sustancial rebaja de pena.

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