Isabel López, la hermana de la cajera Elena López, asesinada hace diecisiete años en un supermercado de Lugo, prestó hoy declaración durante una hora en el Juzgado de primera instancia número 1 de la capital lucense y narró cómo encontró el cadáver de la joven y de otro compañero suyo.
Así lo indicó en declaraciones a Efe Isabel López tras la reunión con el juez y el fiscal, cuyas preguntas se centraron en conocer los detalles de lo que vio y oyó en el supermercado Cash Récord el 30 abril de 1994, ante lo que se comprometió a ser "lo más explícita posible".
La mujer halló los cadáveres cuando llegó al establecimiento con la intención de recoger a su hermana al concluir su jornada laboral.
Se trata de la primera vez que la mujer declara ante la justicia para explicar el testimonio de ese doble crimen cuya autoría aún no ha sido aclarada.
Antes de comparecer ante las autoridades judiciales, Isabel López indicó a los medios de comunicación que acostumbraba a ir a recoger a su hermana el fin de semana y que generalmente "tocaba el claxon del coche y ella salía para avisar y decir cuánto iba a tardar. Pero ese día no salió", observó.
Añadió que ese día acudió con los hijos de su hermana y estuvo esperando "una hora más o menos" a que saliera hasta que, como uno de sus sobrinos solicitó ir al lavabo, intentó entrar en el recinto, pero al ver la puerta cerrada y que nadie contestaba, decidió regresar a casa para dejar a sus sobrinos y regresar de nuevo.
La hermana de la víctima indicó que durante la espera constató que el vehículo de la otra víctima, Esteban Carballedo, estaba en el aparcamiento y dijo que cuando estuvo allí la primera vez, hacia las 20:00 horas, oyó música y percibió la sombra de una persona, aunque después, al regresar, la música había cesado.
Por ello, dijo sospechar que los asesinos podían "estar dentro" mientras ella esperaba en el aparcamiento y lamentó que las autoridades no hayan acelerado desde entonces la investigación.
Isabel López inició el año pasado una huelga de hambre para protestar contra la falta de interés judicial por el caso, una iniciativa que abandonó a finales de septiembre, tras 24 días sin comer, después de ser recibida por el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Galicia, Miguel Ángel Cadenas, que se comprometió a hacer lo posible para reanudar la investigación.
La hermana de la víctima reclama que las autoridades aceleren los trámites para evitar que el crimen quede impune al transcurrir los veinte años de prescripción del delito.
