La Guardia Civil investiga si se produjo omisión de socorro en un atropello múltiple que el lunes acabó con la vida de un sexagenario en Sabarei, en el término municipal de O Corgo.
Según informaron desde la Benemérita, la víctima mortal, Manuel Vilar García, de 61 años y vecino de la zona, fue arrollada por cuatro vehículos, dos de los cuales no pararon tras el incidente, por lo que el instituto armado trabajaba en la identificación de esos dos conductores. El objetivo de esas pesquisas es esclarecer si dejaron el lugar al no percatarse de que habían atropellado a una persona o si, por el contrario, sí eran conscientes, lo que constituiría un delito de omisión de auxilio.
Desde la Guardia Civil informaron de que los hechos ocurrieron a las diez y cuarto de la noche a la altura del punto kilométrico 8,400 de la LU-546, entre Nadela y A Pobra de San Xiao,
En concreto, el atropello se produjo a pocos metros de la gasolinera de Sabarei, al parecer en sentido A Pobra de San Xiao, a un centenar de metros de la casa en la que residía el fallecido.
Según informaron desde el instituto armado, la víctima fue atropellada por un Audi A-4, con placas de matrícula 4073 GDB, conducido por D.R.V, de 35 años de edad y vecino de Samos.
Según las mismas fuentes, a continuación el peatón también fue arrollado por otros dos vehículos que se dieron a la fuga y por un cuarto turismo, un Audi A-3, de matrícula 8455 FJG, conducido por L.C.L,, de 26 años y vecina de Sarria. Los dos conductores que pararon para tratar de auxiliar a la víctima resultaron ilesos en la colisión.
Agentes de la Guardia Civil se desplazaron ayer de nuevo a la a la zona del atropello para realizar pesquisas encaminadas a esclarecer las causas del atropello mortal.
En ese sentido, la Guardia Civil investiga si el fallecido circulaba o no por el extremo de la calzada, un tramo recto de la carretera que, según fuentes de la investigación, estaba seca y limpia en esos momentos.
Al parecer, dada la hora a la que se registró el siniestro, había poca iluminación en la zona, una circunstancia a lo que se le sumó el hecho de que la gasolinera situada a pocos metros del lugar del accidente ya había cerrado al público, por lo que su alumbrado estaba apagado.
Además, según informaron desde la Benemérita, el fallecido transitaba por la carretera sin llevar el preceptivo chaleco reflectante.
Durante la mañana de ayer también se procedió a realizar la autopsia al fallecido en el hospital Lucus Augusti de la capital de la provincia, para determinar las lesiones que le causaron la muerte y si falleció tras recibir el primer impacto o en alguno de los sucesivos.
Soltero y sin hijos, Manuel Vilar García residía en la conocida entre los vecinos como casa do Pocho, una vivienda que está ubicada junto a la iglesia parroquial de Sabarei a pocos metros de distancia de la carretera LU-546. Según testimonios vecinales recabados, era natural de allí y solo dejó este núcleo corgués para cumplir una condena en prisión, tras apuñalar a otra persona.
Al parecer, desde entonces vivía de una pensión. Según los vecinos, era frecuente que transitase por la vía donde perdió la vida, tanto a pie como en bici. Sus restos mortales fueron trasladados ayer al tanatorio de A Pobra de San Xiao y el funeral se celebrará previsiblemente mañana, en la iglesia parroquial de Sabarei, al aplazarse los actos religiosos hasta la llegada de sus dos hermanas, que residen en Barcelona.
