Técnicos del departamento de Infraestructuras de la Dirección General de la Policía estuvieron en las últimas horas en Monforte para ver si el edifico ubicado en la Avenida de Galicia, que hasta hace muy poco albergaba varios servicios de la Consellería de Sanidade, como salud mental y orientación familiar, reúne las condiciones para albergar las dependencias de la comisaría de la Policía Nacional.
La sede policial en Monforte está instalada en la actualidad unos 50 metros más arriba de este lugar, en un edificio particular arrendado por el Ministerio del Interior desde hace unos 15 años.
El alcalde monfortino, el nacionalista Severino Rodríguez, señaló que los inspectores de la Dirección General de la Policía acudieron desde Madrid a la ciudad del Cabe llamados por él, toda vez que, añadió, entiende que la prioridad es «que este corpo de seguridade do Estado non se marche de Monforte, sendo esencial propoñer, proporcionar, calquera opción para que se manteña».
De hecho, el Ayuntamiento monfortino ofreció años atrás otro emplazamiento para la comisaría de Policía, en este caso una antigua nave que ocuparon los bomberos locales situada en la Rúa Duquesa de Alba, que también había recibido en su momento el visto bueno del Ministerio del Interior, pero sin que desde hace cuatro años, cuando se hizo la propuesta, se volviese a saber nada sobre las intenciones del Gobierno central para construir las comisaría en este lugar.
Si en este último caso, sería necesario derribar la edificación existente en la Rúa Duquesa de Alba para levantar la nueva sede policial, con el antiguo centro de Sanidade la obra podría pasar solamente por una remodelación interior del edificio. De ahí que se haya propuesto por reducirse considerablemente la inversión a realizar.
INICIATIVA DEL PSOE. Todo este proceso tuvo su detonante en una propuesta que el PSOE presentó en el Parlamento de Galicia pidiendo la desafección del edificio de Sanidade, de la antigua casa de socorro, como se la conoce en la ciudad del Cabe, y su reversión al Ayuntamiento, al tiempo que recibió el apoyo mayoritario de la Cámara gallega para solicitarle al Ministerio del Interior que sopesase la posibilidad de reconvertirla en comisaría.
El equipo de gobierno local fue, en un primer momento reacio a tal posibilidad, pero finalmente cambió de postura por, dijo el alcalde, «abrir opcións».
