Imputados por maltrato por tener 11 perros en pésimas condiciones en Chapela

La mediación de una protectora de animales evitó el sacrificio de un perro al que hubo que amputarle una pata por las heridas infectadas

La Guardia Civil investiga a una pareja de vecinos de Chapela, en Redondela, acusados de un delito de maltrato animal, por falta de atención y cuidados a varios perros, a uno de los cuales fue preciso amputarle una pata.

El Seprona siguió la pista del caso después de que una asociación para la defensa y protección de animales publicase en su perfil de Facebook el vídeo de un can gravemente herido, una Pastora de Malinois, cuyos propietarios habían requerido los servicios veterinarios para pedir su eutanasia, por el lamentable estado que presentaban las heridas que tenía en una pata, como consecuencia de una supuesta mordida.

La asociación inició una campaña de recaudación de fondos para hacer frente a los gastos de una clínica veterinaria donde el animal se recupera satisfactoriamente, después de haber sufrido una intervención quirúrgica para amputarle la extremidad anterior derecha.

El lamentable estado en el que llegó la perra a la clínica veterinaria dio origen a que el Seprona iniciara unas diligencias de oficio para identificar a su propietario y depurar posibles responsabilidades por la supuesta desatención y malos cuidados que habría recibido el animal.

De este modo los agentes llegaron al lugar en el que residían los propietarios del animal, lugar en el que se encontraron con más perros viviendo en pésimas condiciones higiénico-sanitarias, algunos de ellos con síntomas de desnutrición, hasta el punto de que uno de ellos sufriese una necrosis en una de sus extremidades, como consecuencia de una infección ocasionada por heridas sangrantes compatibles con mordidas de otros perros, todas ellas infectadas con secreción, no recientes, presencia de pulgas, síntomas de desnutrición y atrofia en extremidades traseras.

Un total de once perros de distintas razas, entre ellos tres ejemplares considerados potencialmente peligrosos, sin ningún tipo de autorización, ni seguros de responsabilidad civil, uno de ellos sin chip de identificación y los otros dos a nombre de terceras personas.

Los ejemplares considerados peligrosos fueron retirados cautelarmente por dos Axentes Facultativos Medioambientais de la Xunta de Galicia y recogidos por el Centro de Acollida e Protección de Animais (Caan) de la Diputación Provincial de Pontevedra.

En consecuencia, la Guardia Civil procedió a la investigación penal de la pareja como supuestos autores de un delito de maltrato animal y formuló varias de denuncias por distintas infracciones administrativas a la normativa sobre animales relacionadas con su bienestar.

Comentarios