Guitiriz presume de su típica torta de millo

NUMEROSOS ASISTENTES tenían ganas de catar la gran protagonista de la Festa da Torta de Millo, un producto único, símbolo de Guitiriz, que agotó en apenas un suspiro las existencias dispuestas para la degustación gratuita, cedidas por La Esquina, David, Nimbos, La Artesana y Gómez. E incluso hubo quien echó en falta al menos un puesto de venta para, una vez paladeado su sabor y su calidad, poder comprarla, llevársela a casa y seguir saboreándola tranquilamente, ya sea con el café del desayuno, como postre junto a un buen queso o como tentempié vespertino.

El Concello de Guitiriz tiene claro que la torta de millo es un recurso a potenciar, y por ello apostó por arroparlo en su día grande con un completo programa de actos en el que rugieron los motores, sonaron las gaitas o se pudo jugar a juegos de siempre, además de contar con diversos puestos de venta de artesanía u otros artículos.

La jornada se inauguraba con una exposición de coches clásicos del Automóvil Club de Galicia, lo que permitió a los espectadores disfrutar de joyas de varias décadas, comprobando incluso la evolución de fabricantes como Seat, desde el 1400, uno de los primeros modelos lanzados por el casa español en los años 50; hasta el 850 o el 1500, pasando por el popular 600. No faltaron los 2CV, un Triumph TR3 descapotable o el mítico Renault Gordini, cuya leyenda negra le valió el sobrenombre de ‘el coche de las viudas’.

Los cerca de 30 vehículos congregados realizaron un recorrido hasta los balnearios de Pardiñas y de Guitiriz, que culminó a tiempo para disfrutar de la animación musical del grupo de gaitas de la Escola Municipal de Música, encargado de amenizar la vermú.

A continuación se celebró una comida popular en la carballeira del Campo da Feira, a la que se sumaron más de 150 personas. El menú, servido por el mesón O’ Pedregal, constó de empanada, lacón, pimientos, churrasco y, por supuesto, torta de millo.

En la sobremesa pequeños y mayores disfrutaron de juegos populares como los zancos, el zambombazo o la rana de la mano del club O Cadaval de Pacios (Castro de Rei), una entretenida manera de pasar la tarde antes de llegar a los platos fuertes de la Festa da Torta de Millo, el pregón, a cargo de Xacobe Pérez Paz, y el concierto de Luar na Lubre, con sorpresa incluida.

Y es que el reconocido grupo de música celta contó con unos teloneros de excepción como son los músicos del grupo de gaitas de la escuela municipal, que calentarion el ambiente con la jota de As Neves o la muiñeira Buxos verdes antes de sumar notas con la Banda de Música Municipal de Guitiriz, con la que interpretaron los pasodobles gallegos O chopo y Mallou.

Y fueron los músicos de la banda guitiricense, bajo la batuta de Carlos Diéguez, los que también abrieron a el concierto de Luar na Lubre, con la que interpretaron conjuntamente versiones únicas de Memoria da noite, Chove en Santiago y Tu gitana.