La empresa Astilleros Gondán, de la localidad asturiana de Figueras, botó ayer un nuevo buque construido en sus instalaciones llamado LNG Guardian, un navío que tiene como destino el Mar Adriático, en aguas italianas.
El buque tiene unas medidas de 45 metros de eslora por 12,50 de manga, y es un modelo Stand-by Vessel de la firma española Cintranaval-Defcar. Este es el tercer barco que el astillero realiza para la empresa italiana Fratelli Neri, y en este caso estará equipado para realizar las funciones de apoyo, vigilancia y rescate para una planta regasificadora que se encuentra en territorio italiano, en concreto 12 millas al interior del puerto de Livorno. Está previsto que el buque sea entregado a la empresa italiana en diciembre y con este acuerdo ambas partes mantienen la buena relación comercial que tienen hace años.
Por otra parte, hace unos días se produjo el regreso al puerto de Ribadeo de la corbeta Hashiri, realizada también en el astillero de Figueras, y que nunca ha surcado más allá de aguas gallegas. Este barco, puesto en funcionamiento para ser enviado a Kenia, ha estado los cuatro años que transcurrieron desde su construcción atracado en el puerto coruñés de Sada.
Los motivos que impidieron que el buque desempeñara sus funciones en Kenia siguen sin esclarecerse del todo, aunque en principio todo vino motivado por un pago de los armadores que encargaron el barco, que fue el Gobierno del país africano. Gondán corrió con los costes de su mantenimiento.
