El alcalde de Castro de Rei, Francisco Balado, criticó ayer en un comunicado la «connivencia» que existe entre la secretaria municipal y el PSOE de Castro de Rei y su portavoz, Juan José Díaz Valiño, «para destruir el nuevo equipo de gobierno, porque no es de su color político y ni Valiño ni ella han asumido aún el triunfo del PP en Castro de Rei en las últimas elecciones municipales».
La emisión de un informe de secretaría en el que se acusa al regidor de «coaccionar y amenazar» a la citada funcionaria para que «salgan los candidatos que quiere el señor alcalde y no los resultantes» de un proceso selectivo para contratar a cinco peones y un auxiliar administrativo destapó la caja de los truenos en el Concello chairego. Dicho documento apareció adjunto a un decreto de alcaldía en el que Balado requería a la secretaria para que cumpliese con su horario de trabajo.
En él se expone que el requerimiento es «como consecuencia de que a súa presenza no posto de traballo vén sendo posterior ás 10.00 horas da mañá ata as 14.00 horas, ausentándose media hora para tomar café, o que totaliza 17,5 horas de traballo semanais» y que esta exigencia ya fue expuesta «verbalmente e con anterioridade en varias ocasións».
Francisco Balado asegura que el informe de secretaría «constituye a todas luces un acto de venganza y represalia para excusar una de sus principales obligaciones, que es el cumplimiento de su jornada laboral», ya que su jornada de trabajo estaba siendo «del 50% aproximadamente y su salario del 100%».
Agrega que «en ningún momento» presionó o coaccionó a la secretaria «con ningún tema que no fuese el cumplimiento de su horario de trabajo».
El alcalde de Castro de Rei explica además que, días después de emitir el decreto el 31 de agosto, se enteró de que había un número de Registro guardado en el Ayuntamiento sin existencia de documento alguno, el cual «estuvo pendiente de completar más de una semana» y que apareció después el día del pleno grapado al decreto, «algo que constituye a todas luces un claro ejemplo de prevaricación, pues el Registro municipal debe ser correlativo y sucesivo», añade.
«Por varias indagaciones que he hecho, soy totalmente consciente de que ese informe ha sido preparado por Valiño y ella en la casa consistorial el viernes al atardecer, con carácter retroactivo, pues el número de registro estaba guardado desde el día 31», declara Balado, quien comenta además que «Valiño tuvo el informe de la secretaria antes que yo, algo que constituye un acto de absoluta deslealtad de un secretario hacia su alcalde, pues no tiene sentido que filtre informes suyos a la oposición y los oculte al alcalde».
El regidor chairego también asegura que le consta que Valiño «tiene llaves del ayuntamiento» y que «ha estado en varias ocasiones en mi despacho, desde mi toma de posesión, probablemente examinando notas y otras cuestiones relativas a la gestión municipal, con el fin de causar daño».
