La última reunión mantenida por el grupo Finsa y el comité de Aglomerados Ecar dentro del periodo de consultas para la tramitación del Expediente de Regulación de Empleo (Ere) que afecta a la planta mindoniense trajo consigo un movimiento en la postura mantenida hasta el momento por la maderera gallega. Así, aunque en un principio las recolocaciones de la plantilla mindoniense se preveían solo en Santiago, ahora estos trabajadores tendrán preferencia a la hora de ocupar alguna vacante en Fibranor, que es la planta de Finsa en Rábade y la más próxima a Mondoñedo.
Asimismo, los avances en materia económica, el hueso más duro de la negociación, también sufrieron modificaciones. Si en un principio la propuesta de Finsa era 35 días por año trabajado hasta un máximo de 18 meses y 32.000 euros, ahora esa indemnización subió hasta las 21 mensualidades y un máximo de 38.000 euros.
Finalmente, la empresa confirmó que los contactos mantenidos con empresas de la comarca que puedan absorber algunos de los trabajadores de Ecar están muy avanzadas y es posible que en la próxima reunión que mantengan con el comité -mañana a las 16.30 horas- puedan poner ya sobre la mesa el nombre de alguna de ellas.
Desde la maderera calificaron estos avances de muy positivos e hicieron hincapié en que su ánimo es el de seguir avanzando para conseguir un acuerdo lo más satisfactorio posible para ambas partes.
Asimismo, en las instalaciones mindonienses permanecerán siete personas hasta el desmantelamiento total de la nave: seis para vigilancia y una para mantenimiento, que previsiblemente serán los trabajadores de más edad.
Sindicatos
Desde los sindicatos continúan con su lucha de mejorar en todo los posible las condiciones para las indemnizaciones y mantienen informados en todo momento a los trabajadores a través de asambleas que celebran al término de cada encuentro con la empresa.
Asimismo, esta tarde se debate en el Parlamento gallego una proposición no de ley de los socialistas antes la Comisión de Industria sobre las actuaciones que llevó a cabo el Gobierno autonómico para evitar el cierre de Ecar y para la realización de un plan de dinamización económica en la comarca.
