Fernández Díaz cree que hay iniciativas que provocan ''fractura social y familiar'' en Cataluña

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha alertado hoy de la "fractura social y familiar" que se está generando en Cataluña a raíz de iniciativas nacionalistas como la celebración del simposio, que están haciendo "daño" y "dividiendo" a esta comunidad autónoma.

Durante un desayuno informativo organizado por Europa Press, el ministro, que aunque nacido en Valladolid reside desde los tres años en Barcelona, ha lamentado que está viendo en Cataluña algo que hasta ahora no había sucedido, "la fractura social y familiar", pues muchas familias y amigos reconocen que prefieren no hablar de política. "Esto está pasando", ha advertido Fernández Díaz, antes de dejar claro que el falseamiento de la historia con la finalidad de justificar determinadas decisiones, "llevan a la división y al odio" y carecen del "más elemental sentido de la responsabilidad".

Ya en declaraciones a los periodistas tras la conferencia, el ministro se ha remitido a las palabras del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sobre este asunto y ha insistido en que el Ejecutivo está "abierto permanentemente al diálogo", pero hay unos "límites" que son los que establece la Constitución y las leyes. "A nadie se le puede pedir lo que no puede dar. No se le puede pedir a ningún Gobierno que incumpla la Constitución y sobre todo sus artículos 1 y 2 que señalan que es en el pueblo español donde radica la soberanía", ha sentenciado.

Y para ilustrar el interés del Gobierno de Rajoy por esta comunidad, Fernández Díaz ha resaltado que el Ejecutivo está "ayudando mucho a Cataluña" y en los dos años de legislatura le ha proporcionado 29.000 millones de euros para superar la situación extraordinaria de déficit y de deuda que se encontró CiU al llegar a la Generalitat.

Como es su deber, el Gobierno está ayudando a Cataluña como parte de "indisoluble y entrañable" de España y como "socia fundadora" de nuestro país porque "lo que es bueno para Cataluña es bueno para España y lo que es bueno para el conjunto de los españoles es bueno para los catalanes".

Tras resaltar los vínculos afectivos, familiares, comerciales e históricos de España con Cataluña, tanto en "las derrotas como en las victorias, en el dolor y en la alegría", el titular de Interior ha insistido en que es más lo que les une que lo que les divide. Por eso, ha lamentado que algunos intenten separar a los catalanes entre sí y dividir a su sociedad, lo que ha considerado "el mayor error histórico".

Ha recordado el grito de la Transición en las calles de Cataluña de "hoy más que nunca un solo pueblo" y ha mostrado su preocupación porque "hoy más que nunca algunos quieren no solo un pueblo, sino un pueblo dividido, confrontada y enfrentado entre sí. Pero no lo van a conseguir".