En caída libre

El aeropuerto de Oporto superó el año pasado los seis millones de pasajeros, no perdió usuarios y es una opción preferente para los viajeros gallegos a Europa y América. Oporto capta viajeros en Galicia. Frente a esta realidad, los tres aeropuertos gallegos continuaron en el pasado mes de enero perdiendo pasajeros: cerca de 25.700, lo que equivale a una caída media diaria de 830 durante ese mes. El reparto quedó así: Alvedro -13.400, Peinador - 7.500 y Lavacolla cerca de -4.800. Los tres aeropuertos gallegos perdieron 585.000 viajeros el pasado año. ¿Tiene sentido mantener esta situación? Hay un problema de costes de inversiones y de mantenimiento. Y hay un problema de calidad en la oferta para los potenciales viajeros gallegos. No hay fórmula práctica para el usuario que transforme las tres terminales en un destino único. ¿Cómo puede un viajero de Lugo, que se trasladará normalmente en su propio vehículo hasta la terminal, salir de Alvedro por la mañana y regresar por la noche por Lavacolla o Vigo? El argumento sirve para el viajero lucense o de cualquier otra localidad gallega. Si fue un despilfarro la inversión realizada en los tres aeropuertos, carece de sentido, a la vista de los datos negativos que se suceden, continuar con esta realidad por costes económicos y por peor calidad de servicio. Debería imponerse la lógica.

Acuerdo

Los sindicatos y la dirección de Novagalicia Banco han llegado a un acuerdo sobre el expediente de regulación de empleo en la entidad. Se reduce de 2.250 a 1.850 el número de afectados y hay acuerdo sobre las condiciones de las bajas y prejubilaciones. Es una noticia importante por su contenido social en Galicia, tanto por el número de familias afectadas como por el impacto económico positivo en la reducción del número de bajas.

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