La asociación de vecinos Vilaoriente de Mondoñedo valoró ayer la sentencia del Tribunal Supremo que anula la aprobación del proyecto sectorial concedida por la Xunta para la construcción de la línea de alta tensión entre las subestaciones de Mondoñedo y Boimente (Viveiro), reconociendo su ilegalidad. «Esto supone que los 24 kilómetros de esta línea que discurren por los concellos de Viveiro, Ourol, O Valadouro, Alfoz y Mondoñedo, quedan sin la cobertura legal que otorga un proyecto sectorial», indicó ayer el presidente del colectivo, Carlos Maseda González.
El Supremo dictó un decreto el pasado 22 de octubre en el que declara firme la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) del 22 de enero de 2010, que estimaba el recurso interpuesto por el colectivo vecinal mindoniense contra el acuerdo adoptado por el Consello de la Xunta en el que se aprobaba el proyecto sectorial de la línea de alta entre la subestación de Mondoñedo y la de Boimente y lo anula.
Una lucha que continuará 17 años después
Los vecinos de la asociación de Vilaoriente aseguran que seguirán con su lucha para evitar la ampliación de la subestación y la construcción de más líneas de alta, a pesar de que ya acumulan 17 años de batalla legal desde que a finales de los años noventa E.ON, Begasa y Viesgo iniciaran la tramitación. En este sentido, los vecinos puntualizan que el año pasado salió a exposición pública de nuevo la ampliación de la instalación y el plan para la construcción de otra línea de alta. «Se sigue tramitando, a pesar de todas las sentencias en contra, por lo que este asunto ya está rallando lo penal porque no puedes quebrantar las sentencias», indican desde el colectivo y añaden que las eléctricas deben dejar su empecinamiento en ampliar esta subestación, «porque no pueden estar así eternamente» teniendo en cuenta todas las sentencias que dan la razón a los vecinos en sus reivindicaciones. En sus intentos de frenar esta ampliación, los vecinos ya presentaron alegaciones al Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), cuya exposición al público terminó el pasado día 27 después de haber sido ampliado el plazo en 15 días más de lo marcado en principio, para que recoja la imposibilidad de la ampliación y de hacer más líneas.
