El temporal provocó el hundimiento de maquinaria en el puerto de O Vicedo

Máquina parcialmente hundida en el muelle de O Vicedo. JOSÉ Mª ÁLVEZ
photo_camera Máquina parcialmente hundida en el muelle de O Vicedo. JOSÉ Mª ÁLVEZ

Las fuertes rachas de viento (la máxima de 113 kilómetros) y la intensa lluvia que se cebó con el norte peninsular durante la noche y la mañana del viernes sembró de incidencias la comarca. Los daños más importantes fueron los provocados por el mar de fondo en el puerto de O Vicedo, donde se hundió parcialmente la maquinaria principal de la obra que Portos de Galicia está ejecutando. Según informaron desde el ente público, la plataforma, de setenta toneladas de peso se encuentra debajo del agua, «pero sen tocar fondo polo momento». «Cando as condicións climatolóxicas así o permitan comezarán os traballos para o remolque da máquina cara a unha esquina do porto para, posteriormente, reflotala e sacala a terra», explican en Portos y añaden que «unha grúa de aproximadamente 200 toneladas, encargarase disto».

En el muelle vicendense, la fuerza del mar también arrastró dos embarcaciones, una hacia tierra y otra hacia el muelle.

El mal tiempo que azotó la comarca durante toda la mañana también dejó a Burela sin su mercado semanal. Solo algunos vendedores acudieron a la cita, sin embargo pronto desistieron y desmontaron los puestos, ya que la afluencia de gente tampoco fue mucha debido a la dificultad que entrañaba caminar por la calle con la lluvia y las intensas rachas de viento. Además, en Burela también se registró la caída de una valla publicitaria a la entrada de la localidad y algunos contenedores desplazados, según indicaron desde Protección Civil.

Uno de los percances más comunes fue la caída de árboles. Así en Cervo se registraron cinco incidencias de este tipo: en Rúa, en la carretera de San Román a Trasbar, en el vial de Trasbar a Castelo, en la N-642 y en A Senra. El responsable de Protección Civil, Mario Antuña, explicó que el caído en A Senra impedía el paso del transporte escolar.

Los árboles caídos también fueron un problema en O Vicedo, donde cayó uno a primera hora de la mañana sobre la carretera general en la entrada de la localidad; en Viveiro hubo que retirar otro, que en este caso cayó sobre una pista paralela a la carretera LU-540 en la parroquia de Magazos; en Ribadeo, donde no causaron cortes de carretera ni daños de ningún tipo; y en Trabada.

Asimismo, en la obra de construcción del nuevo pabellón municipal de deportes ribadense, en la avenida Luarca, el viento derribó a primera hora un andamio, aunque no provocó heridos. Sí causó sin embargo algunos trastornos a los operarios, que debieron de reconstruirlo y subsanar algunos pequeños daños que causó al derrumbarse.

AGUA

Las acumulaciones de agua también fueron una constante durante la mañana. Hacia mediodía, el Grumir vivariense tuvo que acudir a Celeiro para desatascar un sumidero en la calle Lavandeiras, al lado del parque infantil, que se había obstruido con las hojas de los árboles y originó un charco importante.

Otra acumulación de agua obligó a circular con precaución en Xove, en la carretera LU-862 a la altura de la cantera de Cuíña y en N-642 entre Foz y Burela la circulación también fue complicada por la mañana. Además, en O Valadouro se registró un desprendimiento en una vía provincial.

DATOS

Las cifras más destacadas que dejó el temporal tras de si fueron los 33,8 litros por metro cuadrado que se recogieron en Viveiro y los 113,4 kilómetros horas de la racha de viento más fuerte, registrada en Mondoñedo. La precipitación acumulada también fue importante en Burela con 21,6 litros y Mondoñedo con 20. La segunda racha de viento más fuerte fue la registrada en Burela, de 110 kilómetros.

ASTURIAS

En el occidente de Asturias, la localidad de Tapia también sufrió los efectos del viento. La finca El Cabillón, un proyecto de la fundación Edes para la reinserción de personas discapacitadas, sufrió numerosos daños en ocho de sus nueve invernaderos y las cosechas se echaron a perder.

Viveiro llegó a acumular 33 litros por metro cuadrado y en Mondoñedo se registró la racha de viento más fuerte, de 113 kilómetros

FLOTA PESQUERA
Los barcos siguen amarrados a puerto

La flota con base en los puertos de Celeiro y de Burela permaneció amarrada por quinto día consecutivo como consecuencia del fuerte viento y del mar de fondo que afectó a todo el litoral gallego. Fuentes de la cofradía de Celeiro informaron de que a primera hora de la mañana soplaba un viento muy fuerte y continuaba el mar de fondo, por lo que ningún barco salió a faenar, ni siquiera las pequeñas embarcaciones de bajura que a mediados de semana se atrevieron a salir al abrigo de la ría. Tampoco en Burela salió al mar ningún barco, ni siquiera los arrastreros, más preparados para soportar los temporales, y la actividad volvió a estar totalmente parada al igual que en los últimos días.

Suceso

Dentro de las incidencias del día en la comarca, aunque sin relación con el temporal, hay que citar el atropello que sufrió un hombre a media tarde de ayer en la Avenida de Viveiro de Foz. La víctima fue atendida por el 061 en el lugar del siniestro y no fue necesario evacuarla al hospital.

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