El Sindicato Labrego Galego (SLG) denuncia la existencia de plantaciones forestales ilegales en Castroverde. Así lo indicó la secretaria general de la organización, Carme Freire, durante una visita a una explotación en Arrubial, en la parroquia de Páramo.
Las propiedades que vio, pertenecientes a Henrique López e Ignacio Arias, tienen prados e instalaciones agrarias totalmente invadidas por plantíos ilegales de pinos y eucaliptos, según el sindicato, que asegura que allí se dan todas las modalidades de infracción posibles: forestación ilegal de tierras agrarias, plantaciones que no respetan las distancias con respecto a las fincas vecinas, e incluso árboles que se plantaron a cinco metros de las naves agrícolas donde guardan maquinaria y otros materiales.
Carme Freire denunció además la «permisividade» de la Xunta a la hora de consentir que «se viole a lei» y se siembren tierras agrarias. Explicó que estas infracciones tienen dos consecuencias muy graves. En primer lugar, se refirió al incremento exponencial del riesgo de incendios y, en segundo, al impacto «moi negativo» de esas plantaciones en la actividad agraria, lo que, dijo también está provocando que se abandonen explotaciones y se aborten nuevas incorporaciones al agro por falta de base territorial.
Desde el SLG aseguran que esa práctica «é un despropósito absoluto» del que tiene toda la responsabilidad la Xunta y los ayuntamientos por no hacer cumplir la Ley de Prevención de Incendios Forestales. Para el sindicato la pasividad del Gobierno gallego a la hora de perseguir el delito de forestar tierras agrarias responde a una estrategia de beneficiar a las industrias que necesitan tierra para producir pasta o agromasa destinada a la energía eléctrica.
