El Rácing escapa de los puestos de descenso

El Racing de Ferrol dio un nuevo paso hacia la salvación tras imponerse por 1-0 al Elche, que tras esta derrota abandona los puestos de ascenso a Primera División, en un encuentro en el que los gallegos supieron manejarse mejor en un partido intenso y casi sin ocasiones de gol.

Pocas veces un cambio de sistema ha propiciado una mutación tan radical como la que ha vivido el conjunto ferrolano en el último mes, en el que ha pasado de ocupar la última plaza, tras encadenar quince jornadas consecutivas sin vencer, a atisbar un esperanzador futuro lejos de los puestos de descenso a Segunda División B.

El triunfo de este domingo ante uno de los gallitos de la categoría les permite afrontar a los de Juan Veiga el tramo final del campeonato con la esperanza de eludir definitivamente uno de los cuatro puestos de descenso,. Y esto que en este partido, a diferencia de otros muchos, los gallegos quizá no hicieron méritos suficientes para vencer.

Sin embargo, a diferencia de antaño, el nuevo Racing de Ferrol no se desploma ante cualquier mínimo revés, como la lesión del central Charpenet a los veintiséis minutos, que apenas hace unas jornadas hubiera bastado como excusa para firmar una nueva derrota.

A los gallegos no les hizo falta ni tan siquiera crear muchas ocasiones de gol, de hecho el Racing cerró la primera parte con apenas un par de remates de Álvaro Antón, para batir la meta ilicitana en una jugada, que aparentemente tampoco entrañaba excesivo peligro.

EL gol deshinchó al Elche
El delantero francés Rudy Carlier, que hoy debutaba como titular ante la ausencia por sanción del uruguayo Medina, aprovechó a los cincuenta y nueve minutos un centro desde la banda derecha para batir con un disparo cruzado a Cavallero tras tocar el balón en un defensa ilicitano.

Un gol que pareció descentrar definitivamente al Elche, que había la segunda parte con una clara vocación ofensiva con la inclusión de un segundo delantero como Luna, ya que pese a que los de David Vidal se adueñaron del balón apenas, salvo en alguna que otra acción a balón parado, lograron llegar con peligro a la meta de Queco Piña.

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