La vigésima edición de la feria del vino celebrada en la localidad de Vilachá, en A Pobra do Brollón, no tuvo la concurrencia de público de otros años, algo que los organizadores achacaron a su coincidencia con el Día de la Madre y a una intensa lluvia que no dio tregua hasta pasadas las cinco de la tarde.
Sin embargo, todos los que se acercaron hasta el lugar en el que se celebra el certamen, un pequeño bosque de castaños salpicado de bodegas centenarias representativas de la arquitectura popular gallega, se lo pasaron en grande. A diferencia de otros feriales similares, en Vilachá, el vino de la Ribeira Sacra que elaboran nueve bodegas adscritas a la denominación de origen, se degusta dentro de las bodegas, lo que para muchos es un valor añadido a su gran calidad. Y es que al ser privadas, no es fácil encontrarlas abiertas en otras fechas del año para poder visitarlas.
Quien se perdió la ocasión de conocerlas fue el presidente de la Diputación de Lugo, José Ramón Gómez Besteiro, quien figuraba en el programa del festejo como pregonero. No pudo acudir a la cita por, según parece, una cita ineludible que tenía en la localidad de Vilalba.
Su puesto fue ocupado por el subdelegado del Gobierno en Lugo, José Vázquez Portomeñe. En su intervención alabó las cualidades, y sobre todo, la gran calidad de los vinos y el trabajo de los viticultores de la Ribeira Sacra, la llamada viticultura heroica.
'Innov@te’
El público asistente a la feria del vino tuvo la oportunidad de conocer el programa ‘Innov@te’ de la Diputación, que dispuso una carpa informativa en el entorno de las bodegas.
Todos los que se interesaron por este proyecto del organismo provincial participaron en el sorteo de ordenadores portátiles, memorias USB y lectores de libros electrónicos. Asimismo, a lo largo de la jornada se realizaron talleres sobre informática dirigidos a niños y mayores.
