El PSOE de Burela criticó ayer al gobierno local por no haber acabado los trámites para enganchar la energía sobrante de las placas fotovoltaicas instaladas en el pabellón Vista Alegre y en el campo de fútbol de A Marosa a la red y así poder cobrar a las compañías eléctricas por ella.
«Estas instalacións contan con 10.000 vatios de potencia e a enerxía mídese no contador de saída da mesma», explican los socialistas, que añaden que las obras de instalación iniciadas por el bipartito ya acabaron en 2011 y dos años después el enganche a la red aún no está hecho.