El PP marca territorio y se impone en los doce municipios chairegos

Los populares salen fortalecidos y logran 482 votos más que en los anteriores comicios. En Marea continúa como tercera fuerza, pero igual que el PSOE y el BNG pierde apoyos
Celestina Penabad acudió a la cita con las urnas en Roupar a sus 108 años
photo_camera Celestina Penabad acudió a la cita con las urnas en Roupar a sus 108 años

El PP volvió a marcar territorio y a defender un feudo clásico para el partido en Galicia. Los populares arrasaron en las comarcas de Terra Chá y Meira, imponiéndose en los doce municipios, con ventajas claras que lo sitúan en una posición cómoda de liderazgo. Los populares, que en las anteriores elecciones vieron caer sus cifras aunque se mantuvieron líderes en diez municipios, salen fortalecidos de esta segunda vuelta electoral, en la que suman 482 votos más que en las anteriores elecciones. Solo caen diez votos en Cospeito, donde aún así arrasan a los demás con un 55,76% , que supone 1.544 papeletas.

Su mejor marca la consiguieron en Abadín, un municipio en el que llegaron al 66,48% de los votos —subieron 33 en estas elecciones—, una cifra similar a la que se contabilizó en Begonte, con el 62,90% y 57 papeletas más que en diciembre de 2015. No se quedaron atrás en A Pastoriza —56,20%— ni en Vilalba, donde con un 55,15% sumaron 94 votos más esta vez. Y alcanzaron la mayoría también en los concellos de Castro de Rei —52,41% con 101 votos más que el año pasado—, Meira —51,30% con 41 nuevas papeletas— y Muras, con un 51,15%.


El PSOE bajó en todos los municipios de Terra Chá y Meira, con fluctuaciones que van de unos pocos votos a varias decenas hasta restar 855 apoyos


En Xermade y en Guitiriz, los populares se acercan a conseguir la mitad de los votos, y aunque tan solo los rozan siguen en una posición cómoda y holgada, con un 48,91% en el primero —33 votos más que en las anteriores— y un 47,94% en el segundo, donde la subida alcanzó 75 papeletas más que en las pasadas elecciones.

En Ribeira de Piquín y Pol, los dos únicos municipios que marcaron diferencias en diciembre con el PSOE como ganador, el PP también logró imponerse esta vez. Recortó distancias y con cifras mucho más ajustadas, pero mejores, ganó en esta vuelta. Alcanzó el 45,13% de los votos en Ribeira de Piquín, donde arañó tres más, y el 42,50% en Pol, donde sumó 21 papeletas a mayores.

En una jornada con menos ilusión entre los votantes y sobrevolando los colegios la sensación de resignación de tener que volver a votar pocos meses después, los resultados no fueron tan positivos para el resto de los partidos como para el PP.

Frente a su subida, el resto tuvieron que afrontar caídas en las cifras, aunque unas más radicales que otras, eso sí. El PSOE bajó en todos los municipios de Terra Chá y Meira, con fluctuaciones que van de unos pocos votos a varias decenas hasta restar 855 apoyos. Igual que En Marea, que pese a mantenerse como la tercera fuerza en todos los ayuntamientos chairegos, no fue capaz de movilizar al electorado que sí había conseguido convencer en el pasado mes de diciembre.

En Marea se mantiene como la tercera fuerza en todos los ayuntamientos chairegos y el BNG fracasa en todos 

Pero si el PSOE tiene que afrontar el bajón de votos y En Marea un menor respaldo —solo se mantuvo en Ribeira de Piquín, con 15 sufragios, y en Muras, donde incluso subió un voto para situarse en los 36—, los peores resultados fueron para el BNG, que fracasó con estrépito en todos los concellos de la comarca.

En total, con resultados que pasan a la mitad de los votos en muchos de los casos, los nacionalistas perdieron 365 votos en Terra Chá y Meira. Sorprende que incluso la caída fuese tan brusca en Muras y A Pastoriza, los únicos concellos donde gobierna el BNG, que pasó de 52 a 24 votos en el primero (28 menos) y de 133 a 64 en el segundo (69 de diferencia).

En el caso de Ciudadanos, pese a que también cae en la mayoría de los concellos y su representación es a veces simbólica, consiguió sumar algunos votos más en Guitiriz, A Pastoriza y Castro de Rei.

PARTICIPACIÓN. La sensación de doble votación que muchos transmitieron este domingo en las mesas, a veces con quejas y otras con risas, se notó en una caída considerable de la participación, al emitirse en la comarca 1.890 votos menos que en las anteriores elecciones de diciembre de 2015.

Comentarios